Sif era una esposa leal.
Ella era considerada el símbolo de la fidelidad.
Una vez el malvado dios Loki le cortó las largas trenzas rubias a Sif.
Cuando Thor descubrió esto, no pudo controlar su ira y atrapó a Loki, amenazándolo con romperle los huesos.
Loki lloró y pidió clemencia y prometió a Thor que convencería a los enanos para que crearan un pelo muy refinado de puro oro, que crecería como pelo natural en la cabeza de Sif.
Uno de los volcanes del planeta Venus se llama como la diosa Nórdica Sif.
La mayoría de los elementos del planeta Venus son nombrados con los nombres de famosas diosas y mujeres. La razón más probable por la cual se nombran así a los elementos de Venus es porque este es el único planeta que tiene el nombre de una diosa, la diosa Romana del amor y la belleza.
Tenía una hermosa cabellera, que la cubría casi hasta los pies, y su color era el de los campos de trigo brillando a la luz del sol.
Un día, mientras dormía, el travieso dios Loki, dios de los ladrones y los aventureros, le cortó su pelo y se lo llevó.
Mientras lloraba desconsolada, su esposo Thor rugió amenazando con los peores castigos al autor de ese atentado. Loki, temeroso de la venganza de Thor, viajó a Asgard y a Smifhelm, morada de los duendes, para solicitar su ayuda.
Ellos tejieron una cabellera mejor y más larga aún que la que tenía Sif, trabajada en preciosos y delicados hilos de oro puro.
Loki se presentó al día siguiente con la nueva cabellera y la furia de los dioses quedó aplacada.
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