30 de octubre de 2017

Escribir A Tus Angeles -

Cuando tengas problemas, puedes escribir a tus Ángeles.
Abre el corazón, no retengas tus pensamientos y vierte tus
sentimientos sobre el papel.

Abandonate y pide a los Ángeles que resuelvan los problemas para tu mayor bien y para el bien de todos.
Dejalos en manos de los Ángeles.
No trates de manipular la situación.
Puede que te sorprenda agradablemente la rapidez con que se resuelve la situación, a menudo de manera inesperada.
Los Ángeles trabajan de maneras que no puedes ni imaginar.
Una manera simple de purificar tus pensamientos es anotar todas tus preocupaciones, haciendo listas de todo lo que te enfada o te hace comportarte de manera poco afín a los Ángeles.
No te guardes nada, continua escribiendo, cuenta a los Ángeles que te da miedo y que te decepciona o desilusiona.

Las emociones producen ciertos efectos sobre la salud.
Cuando revivimos emociones negativas, se produce una reacción que los clarividentes perciben como una neblina de ciertas áreas del aura, que pueden transformarse en agujeros o lágrimas si revivimos muchas veces el suceso traumático.
Cuando hayas acabado, no leas lo que
has escrito, quema las hojas de papel.
Al hacerlo, siente el efecto
limpiador que esto tiene
en tu mente.

Purgar la Ira

También resulta eficaz escribir a alguien que te haya molestado o causado dolor.
Cuando vas a quemar la carta después de haberla escrito, no tiene sentido guardarse nada.
Al escribir a la persona, cuentale exactamente como te sientes.
Inicialmente la ira prepara el cuerpo para corregir la injusticia, pero debe ser liberada.
Cuando no se descarga, se solidifica y enducere, dando lugar al odio.
Debemos honrar nuestras emociones, pero también tenemos que elevar nuestra conciencia, haciendo un acto deliberado de fortalecimiento personal.
A veces nos negamos a perdonar para castigar.
Una manera simple de disolver la ira que sentimos hacia alguien es reconocer lo que realmente nos provoca la conducta de esa persona, y después elegir conscientemente no castigarse uno mismo acarreando esa emoción.
Puedes decir en voz alta: <Ahora,quiero abandonar todo sufrimiento en relación con esta situación>.
A continuación visualiza la persona que tienes que perdonar rodeada de luz angélica.


Fuentes Consultadas
Gaiia Ediciones
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