Es posible que te sientas guido y emprender un proceso de autosanacion, de hecho, muchas dolencias físicas y desordenes comunes tienen una causa sicologia.
La técnica siguiente resulta útil para aliviar el dolor emocional y mental, así como la incomodidad física.
También puede usarse para el dolor agudo o el estres.
El Arcángel Rafael como ángel iluminador de la sanacion, tiene la capacidad de guiar a todos los sanadores.
Es conocido como el medico del reino angélico, el sanador divino por cuya mediación nos curamos y sanamos a los demás.
Como Equilibrar y sanar tus Chakras
Que Hacer
1 - Empezando por el chakra raíz, pon las manos sobre tu cuerpo y permite que se llene de tu energía sanadora. Cuando tu intuición te lo indique, pasa al chakra sacro.
Repite el proceso.
2 - Trabaja sucesivamente cada uno de los chakras, acabando en el chakra corona. Al poner las manos en lo alto de la cabeza, vinculate con tu yo superior.
3 - Para acabar, inspira la luz esmeralda. Cuando te sientas preparado, regresa conscientemente al estado habitual de vigilia.
Como Practicar la Autosancion
Lo que necesitaras
Un CD o cinta de música suave y un aparato reproductor
Que Hacer
1 - Empieza invocando al Arcángel Rafael pidiéndole que guié tus manos.
2 - Sientate cómodamente, en una silla de respaldo recto y asegurate que nadie te vaya a molestar. El sonido de la música suave y relajada ayuda a iniciar el proceso de autorrelajacion.
3 - Pide al Arcángel Rafael que te envié una esfera de luz sanadora verde esmeralda. Siente la energía sanadora flotando sobre tu cabeza.
4 - Permite que esta energía fluya gasta tu chakra corona, sientela descender por tu cuerpo y fijala en el chakra corazón.
5 - Permite que la energía sanadora fluya en dirección descendente por tus brazos, sientela fluir por los chakras de tus manos y llenar tu aura.
6 - Deja que tus manos sean guiadas y colocalas en las zonas del cuerpo que sientas que necesitan sanacion. Si tienes zonas doloridas en tu cuerpo, poner las manos durante unos minutos aliviara, suavizara o disolverá el dolor.
Fuentes Consultadas
Gaia Ediciones
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