18 de enero de 2018

Astrologia China - Año 2018 - Año Del Perro -


Horóscopo Chino 2018: El Año Del Perro De Tierra


El perro aparece para recordar que no todo ha sido color de rosa. Animal de lealtad profunda, en el horóscopo chino 2018 representa la defensa de los derechos, de las minorías, de los más desfavorecidos. Político, el perro no es un conformista. Es el que grita, debate y sale corriendo por la puerta de atrás. Lanza la piedra. Es el que está generando nuevas visiones, crea manifiestos y se alza con un estandarte en favor de las causas difíciles. Pero, a pesar de su locura revolucionaria y su activismo por el cambio climático, el perro seguirá siendo un animal del status quo. Está domesticado y obedece. Juguetón y alegre, no se queda en las nimiedades de los rencores. Es simple, llano y franco. Cada año del perro, la sociedad avanza en las agendas sociales, se pone manos a la obra y se viste de obrero para defender los derechos de los más desfavorecidos. Defiende las causas perdidas, levanta manifestaciones y tiene siempre como norte repartir lo acumulado. Es casi un revolucionario. Y el año en la política es igual.

Cambios y apuestas arriesgadas, contradicciones y movimientos sociales, pero finalmente quedan las mismas instituciones. Y pequeños cambios. No todo se derrumba, no todo cambia. Es un año del sentido común, de las amistades, de la generosidad. Es un año de construir y de revivir los ideales. Un año de especular con las utopías, volverlas a poner en remojo y sacarlas bien ventiladas al sol. Los sueños personales están a flor de piel. Soñar con un mundo más justo. El perro permite lo imposible dentro de lo posible. Avanzar será cosa de no desistir y, sobre todo, de no esconderse. El año, además del revolcón en lo político, propicia algunas condenas profundas, que generan ejemplo, que le abren paso a un nuevo sentido de justicia. Habrá ganancias ocasionales para algunos. Los negocios empiezan a moverse, terreno abonado para las buenas inversiones. Circulación y nuevos emprendimientos que harán que la gente se sienta activa, llena de nuevos oficios. La espada de la justicia es protagonista y no es momento de impunidad. El perro atrapa a los injustos y premia a los correctos.

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Complejo De Dafne o La Angustia de Penetración -




Es el miedo de las jóvenes ante la sexualidad. 
Lo padecen mujeres que no saben o no pueden poner en palabras lo que les pasa. 
Entonces, el cuerpo expresa lo que no pueden decir: se cierran cada vez más y toman una actitud evitativa

Cómo Enfrentar el Problema.

Apolo, dios del sol y la música, fue maldecido por Eros después de burlarse de éste por jugar con un arco y flechas. 
Eros, enojado, tomó dos flechas: una de oro y otra de hierro. 
Con la flecha de oro disparó a la ninfa Dafne, provocando rechazo y desinterés; y, con la de oro disparó a Apolo, provocando amor y desesperación por Dafne
Cuanto más él la perseguía rogándole que se quedara con él, ella más huía. 
La chica huyó hacia las montañas para evitarlo, se encomendó al Dios del río Peneo, y fue en ese momento, casi alcanzada por Apolo, cuando todo su cuerpo comenzó una mágica transformación: su piel se recubrió de corteza, sus delicadas uñas se alargaron multiplicándose en hojas, sus cabellos formaron un denso ramaje, el rostro fue desapareciendo detrás de la corteza y su cuerpo se convirtió en tronco, quedando transformada en un árbol de laurel, con sus raíces hundidas en la tierra, rígida e inmóvil para siempre. 
Apolo abrazó al árbol y, como ya no podía tomarla como esposa, prometió amarla eternamente y declaró que ese árbol sería consagrado a su culto”.

Apolo y Dafne forman parte de un relato de la mitología griega. 
Este mito simboliza el complejo de Dafne, también llamado “angustia a la penetración”, y consiste en el miedo de algunas jóvenes hacia la sexualidad. 
Por miedo, algunas mujeres evitan cualquier tipo de contacto sexual: puede pasar que no quieran estar de novias, que les cueste afrontar situaciones de desagrado, tienen dificultades para poner límites o no saben defenderse ante situaciones que no aceptan. 
Prefieren perjudicarse ellas mismas, aislándose, con tal de no enfrentar la situación de miedo.

Son mujeres que no saben o no pueden poner en palabras lo que les pasa y es ahí donde el cuerpo expresa lo que no pueden decir: se cierran cada vez más y toman una actitud evitativa hacia la sexualidad y penetración. 
Esto puede provocar un espasmo involuntario de músculos que rodean la entrada de la vagina, a tal punto que es imposible el acto sexual, lo que provoca a veces mucho dolor y puede que la mujer se sienta aterrorizada, humillada y frustrada por los intentos. Los repetidos fracasos pueden dar lugar a sentimientos de inadecuación, especialmente en mujeres jóvenes. 
A fin de evitar una confrontación con sentimientos dolorosos, estas mujeres intentan evitar todo tipo de contacto sexual. Esta situación provoca ansiedad, tensión, rabia y sienten mucha persecución interna y externa, en donde encuentran que el único lugar de alivio es el alejamiento de la situación temida. Rechazan a los hombres tomando una actitud de indiferencia, menosprecio y hostilidad.

¿Quiénes lo Padecen?

Generalmente se da en mujeres jóvenes. 
Pero no es excluyente de mujeres de edad más avanzada.

¿Cuál es la causa?

Se da una multiplicidad de factores que pueden conducir a este tipo de complejo. 
Algunos pueden ser:

- Falta de una adecuada educación sexual.

- Educación religiosa muy estricta.

- Efectos psicológicos producto de un abuso o violación.

- Falta de conocimiento e información respecto del propio cuerpo y sexualidad.

- Creencias erróneas con respecto a la sexualidad.

- Crecer con padres que tienen actitudes de rigidez, represión, persecución, provocando sentimientos de culpabilidad respecto al sexo. 

- Hostilidad y rechazo hacia la pareja.

¿Cómo puede revertirse?

- Tomar consciencia que tiene solución.

- Tener paciencia y valorar paso a paso los pequeños logros.

- Eliminar creencias erróneas respecto a la sexualidad.

- Aprender a poner límites a situaciones desagradables, en vez de que sea el cuerpo quien lo haga.

- Aprender a confrontar.

- Pedir lo que se necesita, en lugar de tomar una actitud evitativa.

- Por último, es importante tomar una actitud activa en la resolución del problema. No hay soluciones mágicas, se requiere de mucho compromiso y ganas de resolverlo.

¿Cómo puede colaborar la pareja?

Con paciencia y mucha tolerancia, sin apresurarse. 
Ir muy despacio a medida que vaya adquiriendo mayor confianza, brindándole seguridad de que no se hará nada que ella no quiera. 
Dar confianza y decirle que no va a ser abandonada por esta causa. 
Apuntar siempre a la comunicación. 
En síntesis, mostrar amor, comprensión, calidez y protección.


Fuentes: Licenciada Ofelia Salgueiro, 
Integrante del equipo profesional del 
Instituto de Psicología Argentino 

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Complejo De Job - En Que Consiste -



En esta ocasión revisamos los textos bíblicos para entender el nombre de este complejo psicológico que se evidencia en la piel. 

Aunque el personaje de Job sea más conocido por su paciencia, el Job bíblico soportó como prueba de fe muchas penalidades, entre ellas la ulceración de su piel.

Y es que este curioso complejo de Job nos lleva a los problemas dermatológicos de las personas con una baja autoestima que se sienten ofendidas o agraviadas. Las personas que sufren el complejo de Job piensan que no valen nada y que por eso el resto de la gente los puede tratar mal, ofenderlos o ningunearlos. Ocurra o no ocurra la afrenta, el caso es que cuando se sienten ofendidos aparecen los problemas en la piel.

Lógicamente este complejo puede derivar en otros complejos físicos relacionados con el aspecto, pero el lado más preocupante del complejo de Job es la escasa valoración de una misma que tiene la persona que lo padece. Ella cree que es lógico que los demás arremetan contra ella, ya que es una persona que no vale gran cosa.

Estamos hablando en el caso de este y de otros muchos complejos de un problema de baja autoestima que desaparece cuando se encuentra el equilibrio. 

Superar el complejo de Job pasa por mejorar la autoestima y hacerse más fuerte, lo suficientemente fuerte como para pensar que no ofende que quien quiere, sino quien puede.


Fuentes :Laura Vélez  
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Hemisferios - Cerebro -



Hemisferio Izquierdo

El hemisferio izquierdo es la parte motriz capaz de reconocer grupos de letras formando palabras, y grupos de palabras formando frases, tanto en lo que se refiere al habla, la escritura, la numeración, las matemáticas y la lógica, como a las facultades necesarias para transformar un conjunto de informaciones en palabras, gestos y pensamientos. 
John Hughlings Jackson neurólogo británico, ya en 1878 describió el hemisferio izquierdo como el centro de la facultad de expresión. 

Dependiendo de su severidad, una embolia que afecte a esta estructura puede producir pérdidas funcionales, pérdida funcional del habla y afectar destrezas motoras en el lado derecho del cuerpo. 
Según la teoría psicolingüística el proceso de construcción de una frase está regido por un cierto número de ideas relacionadas entre sí, pero el mecanismo que permite a la mente agrupar palabras para formar frases gramaticales no está totalmente descifrado. 
El hemisferio almacena conceptos que luego traduce a palabras (amor, amour, amore, love, liebe) más bien que una memoria textual. 
Es decir, el cerebro comprende las ideas , los conceptos y los almacena en un lenguaje no verbal, que luego traduce a un lenguaje o idioma aprendido por el individuo mediante la cultura. 
Los tests de inteligencia que investigan el vocabulario, la comprensión verbal, la memoria y el cálculo aritmético mental, detectan el origen de la actividad en el hemisferio izquierdo. 
El hemisferio izquierdo se especializa en el lenguaje articulado, control motor del aparato fono articulador, manejo de información lógica, pensamiento proporcional, procesamiento de información en series de uno en uno, manejo de información matemática, memoria verbal, aspectos lógicos gramaticales del lenguaje, organización de la sintaxis, discriminación fonética, atención focalizada, control del tiempo, planificación, ejecución y toma de decisiones y memoria a largo plazo. 
Los test de inteligencia miden sobre todo la actividad de este hemisferio. 
Muchas de las actividades atribuidas al consciente le son propias. 
Gobierna principalmente la parte derecha del cuerpo. 
Procesa la información usando el análisis, que es el método de resolver un problema descomponiéndolo en piezas y examinando estas una por una.

Hemisferio Derecho

El hemisferio derecho gobierna tantas funciones especializadas como el izquierdo. 
Su forma de elaborar y procesar la información es distinta del hemisferio izquierdo. 
No utiliza los mecanismos convencionales para el análisis de los pensamientos que utiliza el hemisferio izquierdo. 
Es un hemisferio integrador, centro de las facultades viso-espaciales no verbales, especializado en sensaciones, sentimientos, prosodia y habilidades especiales; como visuales y sonoras no del lenguaje como las artísticas y musicales. 
Concibe las situaciones y las estrategias del pensamiento de una forma total. Integra varios tipos de información (sonidos, imágenes, olores, sensaciones) y los transmite como un todo. 
El método de elaboración utilizado por el hemisferio derecho se ajusta al tipo de respuesta inmediata que se requiere en los procesos visuales y de orientación espacial. 
El lóbulo frontal derecho y el lóbulo temporal derecho parecen los encargados de ejercer las actividades especializadas no verbales del hemisferio derecho. 
Esto se corresponde, en muchos aspectos, con las funciones de control del habla que ejercen el lóbulo frontal y el lóbulo temporal del hemisferio izquierdo. 
Los otros dos lóbulos del hemisferio derecho, el parietal y el lóbulo occipital, tienen al parecer menos funciones. Sin embargo, como resultado del estudio de pacientes con el cerebro dividido (seccionado), o con pacientes que padecen lesiones en el hemisferio izquierdo, se ha detectado un pequeño grado de comprensión verbal en el lóbulo parietal derecho, que tiene la capacidad de comprender una selección de nombres y verbos simples. Y recíprocamente, el lóbulo parietal izquierdo parece que tiene ciertas funciones espaciales limitadas. 
Por lo tanto, aunque el hemisferio derecho está, sin duda, especializado, en las funciones no verbales, concretamente en las viso-espaciales, no resulta fácil discernir las diferencias entre los dos hemisferios. 
El hemisferio derecho está considerado de cualquier modo, como el receptor e identificador de la orientación espacial, el responsable de nuestra percepción del mundo en términos de color, forma y lugar. John Huglings Jackson informó que un paciente con un tumor en el lado derecho del cerebro no reconocía objetos, lugares ni personas. 
Utilizando sus facultades somos capaces de situarnos y orientarnos; podemos saber por qué calle estamos caminando mirando simplemente la arquitectura de los edificios que hay a uno y otro lado de ella, esto es la forma y aspecto de las fachadas, de los tejados y de las puertas de entrada. Si vamos caminando por la calle y reconocemos un rostro, la identificación de dicho rostro también corre a cargo de la memoria visual del hemisferio derecho. 
El nombre que corresponde a la persona que posee dicho rostro conocido lo proporciona, en cambio el hemisferio izquierdo.

Muchas de las actividades atribuidas al inconsciente le son propias. 
Procesa la información mayoritariamente usando el método de síntesis, componiendo o formando la información a partir de sus elementos, a un conjunto. 
Controla, además, el lado izquierdo del cuerpo humano. 
En este caso, una embolia puede producir pérdida funcional o afectar las destrezas motoras del lado izquierdo del cuerpo. 
También puede causar alteración de la atención normal a la parte izquierda del cuerpo y sus alrededores aun con el otro.
Fuente: Wikipedia
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Autoestima - Psicologia -


La autoestima es un conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de comportamiento dirigidas hacia nosotros mismos, hacia nuestra manera de ser y de comportarnos, y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y nuestro carácter. 
En resumen, es la percepción evaluativa de uno mismo.

La importancia de la autoestima estriba en que concierne a nuestro ser, a nuestra manera de ser y al sentido de nuestra valía personal. 
Por lo tanto, no puede menos de afectar a nuestra manera de estar y actuar en el mundo y de relacionarnos con los demás. 
Nada en nuestra manera de pensar, de sentir, de decidir y de actuar escapa a la influencia de la autoestima.

Abraham Maslow, en su jerarquía de las necesidades humanas, describe la necesidad de aprecio, que se divide en dos aspectos, el aprecio que se tiene uno mismo (amor propio, confianza, pericia, suficiencia, etc.), y el respeto y estimación que se recibe de otras personas (reconocimiento, aceptación, etc.). 
La expresión de aprecio más sana según Maslow es la que se manifiesta «en el respeto que le merecemos a otros, más que el renombre, la celebridad y la adulación».

Carl Rogers, máximo exponente de la psicología humanista, expuso que la raíz de los problemas de muchas personas es que se desprecian y se consideran seres sin valor e indignos de ser amados; de ahí la importancia que le concedía a la aceptación incondicional del cliente. En efecto, el concepto de autoestima se aborda desde entonces en la escuela humanista como un derecho inalienable de toda persona, sintetizado en el siguiente «axioma»:

Todo ser humano, sin excepción, por el mero hecho de serlo, es digno del respeto incondicional de los demás y de sí mismo; merece estimarse a sí mismo y que se le estime.

En virtud de este razonamiento, incluso los seres humanos más viles merecen un trato humano y considerado. 
Esta actitud, no obstante, no busca entrar en conflicto con los mecanismos que la sociedad tenga a su disposición para evitar que unos individuos causen daño a otros—sea del tipo que sea—.

El concepto de autoestima varía en función del paradigma psicológico que lo aborde (psicología humanista, psicoanálisis, ó conductismo). 
Desde el punto de vista del psicoanálisis, radicalmente opuesto, la autoestima está relacionada con el desarrollo del ego; por otro lado, el conductismo se centra en conceptos tales como «estímulo» "respuesta», «refuerzo», «aprendizaje», con lo cual el concepto holístico de autoestima no tiene sentido. 
La autoestima es además un concepto que ha traspasado frecuentemente el ámbito exclusivamente científico para formar parte del lenguaje popular. 
El budismo considera al ego una ilusión de la mente, de tal modo que la autoestima, e incluso el alma, son también ilusiones; el amor y la compasión hacia todos los seres con sentimientos y la nula consideración del ego, constituyen la base de la felicidad absoluta. En palabras de Buda, «el budismo no es el camino hacia la felicidad, la felicidad es el camino».

Fundamentos de la Autoestima

La capacidad de desarrollar una confianza y un respeto saludables por uno mismo y por los demás es propia de la naturaleza de los seres humanos, ya que el sólo hecho de poder pensar constituye la base de su suficiencia, y el único hecho de estar vivos es la base de su derecho a esforzarse por conseguir felicidad. 
Así pues, el estado natural del ser humano debería corresponder a una autoestima alta. 
Sin embargo, la realidad es que existen muchas personas que, lo reconozcan o no, lo admitan o no, tienen un nivel de autoestima inferior al teóricamente natural.

Ello se debe a que, a lo largo del desarrollo, y a lo largo de la vida en sí, las personas tienden a apartarse de la autoconceptualización [y conceptualización] positivas, o bien a no acercarse nunca a ellas. 
Los motivos por los que esto ocurre son diversos, y pueden encontrarse en la influencia negativa de otras personas, en un autocastigo por haber faltado a los valores propios [o a los valores de su grupo social], o en un déficit de comprensión o de compasión por las acciones que uno realiza y, por extensión, de las acciones que realizan los demás.

Grados de Autoestima

La autoestima es un concepto gradual. 
En virtud de ello, las personas pueden presentar en esencia uno de tres estados:

Tener una autoestima alta equivale a sentirse confiadamente apto para la vida, o, usando los términos de la definición inicial, sentirse capaz y valioso; o sentirse acertado como persona.

Tener una baja autoestima es cuando la persona no se siente en disposición para la vida; sentirse equivocado como persona.

Tener un término medio de autoestima es oscilar entre los dos estados anteriores, es decir, sentirse apto e inútil, acertado y equivocado como persona, y manifestar estas incongruencias en la conducta —actuar, unas veces, con sensatez, otras, con irreflexión—-, reforzando, así, la inseguridad.

En la práctica, y según la experiencia de Nathaniel Branden, todas las personas son capaces de desarrollar la autoestima positiva, al tiempo que nadie presenta una autoestima totalmente sin desarrollar. 
Cuanto más flexible es la persona, tanto mejor resiste todo aquello que, de otra forma, la haría caer en la derrota o la desesperación.

Importancia de la Autoestima Positiva

Es imposible la salud psicológica, a no ser que lo esencial de la persona sea fundamentalmente aceptado, amado y respetado por otros y por ella misma.

La autoestima permite a las personas enfrentarse a la vida con mayor confianza, benevolencia y optimismo, y por consiguiente alcanzar más fácilmente sus objetivos y autorrealizarse.

Permite que uno sea más ambicioso respecto a lo que espera experimentar emocional, creativa y espiritualmente. 
Desarrollar la autoestima es ampliar la capacidad de ser felices; la autoestima permite tener el convencimiento de merecer la felicidad.

Comprender esto es fundamental, y redunda en beneficio de todos, pues el desarrollo de la autoestima positiva aumenta la capacidad de tratar a los demás con respeto, benevolencia y buena voluntad, favoreciendo así las relaciones interpersonales enriquecedoras y evitando las destructivas.

El amor a los demás y el amor a nosotros mismos no son alternativas opuestas. 
Todo lo contrario, una actitud de amor hacia sí mismos se halla en todos aquellos que son capaces de amar a los demás.
José-Vicente Bonet, en su libro Sé amigo de ti mismo: manual de autoestima, recuerda que la importancia de la autoestima es algo evidente: La importancia de la autoestima se aprecia mejor cuando cae uno en la cuenta de que lo opuesto a ella no es la heteroestima, o estima de los otros, sino la desestima propia, rasgo característico de ese estado de suma infelicidad que llamamos «depresión». Las personas que realmente se desestiman, se menosprecian, se malquieren…, no suelen ser felices, pues no puede uno desentenderse u olvidarse de sí mismo.

Falsos Estereotipos

La Comodidad no es Autoestima:

A una persona con la autoestima baja —o «equivocada», según la terminología de Branden—, cualquier estímulo positivo, a lo más que podrá llegar, será a hacerla sentir cómoda o, a lo sumo, mejor con respecto a sí misma únicamente durante un tiempo. 
Por lo tanto, los bienes materiales, o las relaciones sexuales, o el éxito, o el aspecto físico, por sí solos, producirán sobre esa persona comodidad, o bien un falso y efímero desarrollo de la autoestima, pero no potenciarán realmente la confianza y el respeto hacia uno mismo.

La Autoestima no es Competitiva ni Comparativa:

Paradójicamente, la mayoría de las personas buscan la autoconfianza y el autorrespeto fuera de sí mismas, motivo por el cual están abocadas al fracaso. Según Nathaniel Branden, «la autoestima se comprende mejor como una suerte de logro espiritual ó mental, es decir, como una victoria en la evolución de la conciencia». Así, la autoestima proporciona serenidad espiritual, la cual a su vez permite a las personas disfrutar de la vida. El estado de una persona que no está en guerra ni consigo misma ni con los demás es una de las características más significativas de una autoestima sana.

La verdadera autoestima no se expresa mediante la autoglorificación a expensas de los demás, o por medio del afán de ser superior a otras personas o de rebajarlas para elevarse uno mismo. 
La arrogancia, la jactancia y la sobrevaloración de las propias capacidades revelan una autoestima equivocada, y no un exceso de autoestima.

La Autoestima no es Narcisismo:

Un error común consiste en pensar que el amor a uno mismo es equivalente al narcisismo. Sin embargo, el narcisismo es un síntoma de baja autoestima, lo cual significa desamor por uno mismo. Una persona con una autoestima saludable se acepta y ama a sí misma incondicionalmente. Conoce sus virtudes, pero también sus defectos. A pesar de ello, es capaz de conocer y aceptar tanto las virtudes como los defectos y vivir amándose a sí misma. Por el contrario, una persona narcisista no es capaz de conocer y/o aceptar sus defectos, que siempre trata de ocultar, al tiempo que intenta amplificar sus virtudes ante los demás para, en el fondo, tratar de convencerse a sí misma de que es una persona de valor y tratar de dejar de sentirse culpable por sus defectos.

Indicadores de autoestima:

Indicios positivos de autoestima

La persona que se autoestima suficiente se comporta así :

-  Cree con firmeza en ciertos valores y principios, y está dispuesta a defenderlos incluso aunque encuentre oposición. 
Además, se siente lo suficientemente segura de sí misma como para modificarlos si la experiencia le demuestra que estaba equivocada.

-  Es capaz de obrar según crea más acertado, confiando en su propio criterio, y sin sentirse culpable cuando a otros no les parezca bien su proceder.

-  No pierde el tiempo preocupándose en exceso por lo que le haya ocurrido en el pasado ni por lo que le pueda ocurrir en el futuro. Aprende del pasado y proyecta para el futuro, pero vive con intensidad el presente.

-  Confía plenamente en su capacidad para resolver sus propios problemas, sin dejarse acobardar fácilmente por fracasos y dificultades. 
Y, cuando realmente lo necesita, está dispuesta a pedir la ayuda de otros.

-  Como persona, se considera y siente igual que cualquier otro; ni inferior, ni superior; sencillamente, igual en dignidad; y reconoce diferencias en talentos específicos, prestigio profesional o posición económica.

-  Da por sentado que es interesante y valiosa para otras personas, al menos para aquellos con los que mantiene amistad.

-  No se deja manipular, aunque está dispuesta a colaborar si le parece apropiado y conveniente.

-  Reconoce y acepta en sí misma diferentes sentimientos y pulsiones, tanto positivos como negativos, y está dispuesta a revelárselos a otra persona, si le parece que vale la pena y así lo desea

-  Es capaz de disfrutar con una gran variedad de actividades
.
-  Es sensible a los sentimientos y necesidades de los demás; respeta las normas sensatas de convivencia generalmente aceptadas, y entiende que no tiene derecho —ni lo desea— a medrar o divertirse a costa de otros.

Indicios Negativos de Autoestima:

La persona con autoestima deficiente suele manifestar algunos de las siguientes catracteristicas:

-  Autocrítica rigorista, tendente a crear un estado habitual de insatisfacción consigo misma.

-  Hipersensibilidad a la crítica, que la hace sentirse fácilmente atacada y a experimentar resentimientos pertinaces contra sus críticos.

-  Indecisión crónica, no tanto por falta de información, sino por miedo exagerado a equivocarse.

-  Deseo excesivo de complacer: no se atreve a decir «no», por temor a desagradar y perder la benevolencia del peticionario.

-  Perfeccionismo, o autoexigencia de hacer «perfectamente», sin un solo fallo, casi todo cuanto intenta; lo cual puede llevarla a sentirse muy mal cuando las cosas no salen con la perfección exigida.

-  Culpabilidad neurótica: se condena por conductas que no siempre son objetivamente malas, exagera la magnitud de sus errores y delitos y/o los lamenta indefinidamente, sin llegar a perdonarse por completo.

-  Hostilidad flotante, irritabilidad a flor de piel, siempre a punto de estallar aun por cosas de poca importancia; propia del supercrítico a quien todo le sienta mal, todo le disgusta, todo le decepciona, nada le satisface.

-  Tendencias defensivas, un negativo generalizado (todo lo ve negro: su vida, su futuro y, sobre todo, su sí mismo) y una inapetencia generalizada del gozo de vivir y de la vida misma.

La  Autoestima en el Mundo Real

En la práctica, la autoestima, al depender en parte de la heteroestima, se ve intensamente influida por las condiciones sociales. 
El concepto que una persona tiene de sí misma y de los demás, y lo que una persona siente por sí misma y por los demás, son la base de las relaciones humanas, y por lo tanto, decisivos para las contigencias del ser humano. 
Lejos del concepto ideal de autoestima que la psicología humanista propugna, desligada completamente del ego, las personas normalmente conviven con éste, debiendo lidiar continuamente con sus consecuencias, o, dicho de otro modo, el altruismo puro, salvo en personas de gran bondad y dedicadas íntegramente al desarrollo espiritual, raramente se encuentra. 
La cultura, la política, la economía, la sociedad, la historia misma, están determinadas por la autoestima de las personas, y al mismo tiempo son determinantes. 
Nada escapa a la influencia de la autoestima, ni siquiera la propia concepción de la autoestima. 
Por ello, y para evitar confusiones, deberá valorarse el concepto de autoestima de forma diferente según cada ideología.

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El Cerebro Es El Organo Más Característico Del Ser Humano -

Aunque pocas veces nos paramos a pensar en la importancia que tiene dentro de la regulación de nuestras actividades cotidianas. 
Anatómicamente el cerebro es la parte más voluminosa del encéfalo y está dividido por un surco central llamado cisura longitudinal en los hemisferios derecho e izquierdo, a la vez unidos por el cuerpo calloso. 
La superficie de cada hemisferio presenta un conjunto de pliegues que forman una serie de depresiones irregulares, son los surcos o cisuras. 
La disposición que adoptan estos surcos nunca es igual entre los cerebros de diferentes personas, y también adoptan disposiciones distintas en ambos lados de un mismo encéfalo.

Cada hemisferio cerebral se divide en cinco lóbulos: el frontal, el parietal, el temporal, el occipital y la ínsula de Reil. 
En general, los cuatro primeros lóbulos se sitúan debajo de los huesos que llevan el mismo nombre. 
Así, el lóbulo frontal descansa en las profundidades del hueso frontal, el lóbulo parietal bajo el hueso parietal, el lóbulo temporal bajo el hueso temporal y el lóbulo occipital debajo de la región correspondiente a la protuberancia del occipital. 
La ínsula de Reil no puede verse en la superficie del encéfalo, ya que se sitúa en el fondo de otra cisura llamada cisura de Silvio.



El cerebro contiene varios billones de células, de las que unos 100.000 millones de neuronas y posee casi 100 trillones de interconexiones en serie y en paralelo que proporcionan la base física que permite el funcionamiento cerebral. 
Gracias a los circuitos formados por las células nerviosas o neuronas, es capaz de procesar información sensorial procedente del mundo exterior y del propio cuerpo. 
El cerebro desempeña funciones sensoriales, funciones motoras y funciones de integración menos definidas asociadas con diversas actividades mentales. 
Algunos procesos que están controlados por el cerebro son la memoria, el lenguaje, la escritura y la respuesta emocional.

El funcionamiento del cerebro se basa en el concepto de que la neurona es una unidad anatómica y funcional independiente, integrada por un cuerpo celular del que salen numerosas ramificaciones llamadas dendritas, capaces de recibir información procedente de otras células nerviosas, y de una prolongación principal, el axón, que conduce la información hacia las otras neuronas en forma de corriente eléctrica. 
Pero las neuronas no se conectan entre sí por una red continua formada por sus prolongaciones, sino que lo hacen por contactos separados por unos estrechos espacios denominados sinapsis. La transmisión de las señales a través de las sinapsis se realiza mediante unas sustancias químicas conocidas como neurotransmisores, de los cuales hoy se conocen más de veinte clases diferentes.

El cerebro tiene a su cargo las funciones motoras, sensitivas y de integración. 
El hemisferio cerebral izquierdo está especializado en producir y comprender los sonidos del lenguaje, el control de los movimientos hábiles y los gestos con la mano derecha. 
El hemisferio derecho está especializado en la percepción de los sonidos no relacionados con el lenguaje (música, llanto…), en la percepción táctil y en la localización espacial de los objetos.

Hoy en día se sabe que en el lóbulo occipital se reciben y analizan las informaciones visuales. 
En los lóbulos temporales se gobiernan ciertas sensaciones visuales y auditivas. 
Los movimientos voluntarios de los músculos están regidos por las neuronas localizadas en la parte más posterior de los lóbulos frontales, en la llamada corteza motora. 
Los lóbulos frontales están relacionados también con el lenguaje, la inteligencia y la personalidad, si bien, se desconocen funciones específicas en esta área. 
Los lóbulos parietales se asocian con los sentidos del tacto y el equilibrio. En la base del encéfalo se sitúa el tronco cerebral, que gobierna la respiración, la tos y el latido cardíaco. 
Detrás del tronco se localiza el cerebelo, que coordina el movimiento corporal manteniendo la postura y el equilibrio. 
Las áreas cerebrales que gobiernan las funciones como la memoria, el pensamiento, las emociones, la conciencia y la personalidad, resultan bastante más difíciles de localizar.




La memoria está vinculada al sistema límbico, situado en el centro del encéfalo. Por lo que respecta a las emociones, se sabe que el hipocampo controla la sed, el hambre, la agresión y las emociones en general. Se postula que los impulsos procedentes de los lóbulos frontales se integran en el sistema límbico, llegando al hipotálamo, estructura que que a su vez regula el funcionamiento de la glándula hipofisaria, productora de varias hormonas.

Es en el córtex donde se integran las capacidades cognitivas, donde se encuentra nuestra capacidad de ser conscientes, de establecer relaciones y de hacer razonamientos complejos. Lo que llamamos sustancia gris es una pequeña capa que recubre el resto del cerebro. Pero el córtex cerebral humano tiene una característica que la distingue de todas las demás. 
Tiene numerosos pliegues. Esto aumenta notablemente su superficie. Si la extendiéramos, ocuparía el área equivalente a cuatro folios. En comparación, la de un chimpancé sólo sería de un folio, la de la mona ocuparía como una tarjeta postal y la de la rata la de un sello de correos.



El procesamiento de la información sensorial recogida del mundo que nos rodea y de nuestro propio cuerpo, las respuestas motrices y emocionales, el aprendizaje, la conciencia, la imaginación y la memoria son funciones que se realizan por circuitos formados por neuronas interrelacionadas a través de los contactos sinápticos. 
Es por este motivo que el funcionamiento cerebral se asemeja, en parte, a una computadora. Pero el cerebro es muchísimo más complejo que un ordenador, ya que está dotado de propiedades que solo proporciona su naturaleza biológica.


Fuentes: Marta Guerri
Para http://www.psicoactiva.com/
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