17 de noviembre de 2017

Diagrama - Horoscopo Chino - Predicciones 2014 - Relaciones De Pareja y Lazos Afectivos





Realizado Por Venus
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Cerdo o Jabali - Horoscopo Chino - - Lazos Afectivos y Relaciones de Pareja



Este año tendrá momentos alegres y divertidos con su pareja, pero no es recomendable esperar demasiado de esa otra persona.

Para los Cerdos, será tan sólo un año más para trabajar en su individualidad, su autoestima y para estar en contacto con sus propios deseos. 
Se darán cuenta de que estaban inmersos en ilusiones y quimeras, que estaban obstaculizando su felicidad.

Poco a poco y con mucho cuidado, harán nuevos amigos que están mejor relacionados con sus propios intereses. 

Asimismo, este año, los Cerdos serán capaces de sacar el máximo provecho de las experiencias de los años anteriores y descubrirán que tienen el poder de elegir con quien quieren relacionarse y con quién no.


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El Perro - Pareja y Relaciones Afectivas - Predicciones 2014


El año del Caballo traerá algunos contratiempos para la pareja, los cuales serán principalmente debido a problemas en la comunicación. 

Entender la brevedad y la esencia real de las situaciones, será necesario, a fin de resolverlas con calma y con mucho diálogo. 

Las conciliaciones serán más intensas que los desacuerdos.

Algunos hechos confusos podrían cambiar la forma sosegada de una amistad. 
Antes de sacar conclusiones y tomar decisiones, ambas partes deben dejar pasar un tiempo y tener cierta distancia para evaluar las razones.

El deseo de ayudar a otros hará que los Perros se unan a nuevos equipos de participación social, lo que será una experiencia gratificante.


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El Gallo - Pareja Y Relaciones Afectivas - Predicciones 2014


El año del Caballo tiene una influencia positiva en las relaciones de los Gallos. 

Dentro de la  pareja, el estrés se alivia, y el deseo y la seducción van a volver. 

Horas de diversión harán quee este signo se sienta más relajado y ser menos crítico con su pareja, lo que les ayudará a recoger proyectos postergados.

El reconocimiento social y la armonía familiar se harán realidad en el año del Caballo. 

Las relaciones fluirán en armonía espontánea, pero los gallos no deben bajar la guardia. 

Tienen que tener cuidado con los que guardan silencio, ya que ésta puede ser una conspiración o simplemente necesitan un poco más de atención.

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El Mono - Horoscopo Chino - Pareja y Relaciones Afectivas - Predicciones 2014


Para los Monos, el mejor camino a seguir es ser honesto con sus sentimientos, ya que a veces esto es un poco difícil, porque tienen miedo de sufrir.

Psicoterapia, una revista, hablar con amigos, le ayudará a clarificar sus emociones. 
Será necesario abrir el dialogo para evitar malentendidos y mantener a la pareja lejos de los conflictos evitables.

No habrá grandes cambios en las relaciones interpersonales. 
Los monos se preguntarán acerca de los roles y actitudes inconscientes repetidas, y verán que pueden adoptar más de una sola postura con la gente. 
Este será un año de aprendizaje social.
Las relaciones van a evolucionar hacia el mejor resultado: la autenticidad.

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La Cabra - Horoscopo Chino - Pareja y Relaciones Afectivas - Año 2014


La influencia Caballo tiene un buen efecto sobre Cabras; aporta creatividad y sensualidad a las palabras de la pareja y les ayuda a cementar el vínculo y asegurarlo. 

Algunas de estas personas que están involucradas en relaciones dolorosas que finalmente serán capaces de acabar con ellos y tomar un camino de amor, ganando así la paz y la felicidad. 
También será un año propicio para las cabras que deseen tener hijos.

Ellos cuentan con el reconocimiento y la protección de personas influyentes con excelentes contactos y recursos que harán que sus vidas tanto más agradables y más fáciles. 
Algunas personas que se consideran amigos envidiarán a las cabras por la luz que adquirirán este año. 
Por eso deben tratar de no enojarse y dejar que los sentimientos fluyan naturalmente.

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El Caballo - Horoscopo Chino - Relaciones De Pareja y Lazos Afectivos -


Los Caballos, siendo espontáneos, tienen una tendencia a ser aceptados por los demás. 

Ellos tienden a darse plenamente en cada nueva relación calidad que termina socavando a su ser interior. 

Afortunadamente, este rasgo disminuye con la edad y las relaciones son más fuertes y más estables en el futuro.

Su propio año no será demasiado tranquilo dice el Horóscopo chino. 

Las emociones estarán muy intensas. 
Habrá gran competitividad dentro de la pareja y es indispensable detenerla y reemplazarla por admiración y trabajo en equipo. 
En periodos de inquietud, lo mejor será pasar tiempo a solas.


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La Serpiente - Horoscopo Chino - Relaciones de Pareja y Lazos Afectivos



Los Serpientes y sus parejas lograrán momentos inolvidables: se fusionan en mente, cuerpo y espíritu como verdaderas almas gemelas. 

Los Serpientes solteros que no encuentren pareja van a sentirse realizados en sí mismos, algo que será necesario para establecer vínculos fuertes en el futuro cercano.

El año 2014 encuentra gente de la serpiente más relajada frente a diversas situaciones sociales, sino que serán capaces de expresarse de forma espontánea y no preocuparse tanto por las opiniones de otras personas. 
En este año, se sentirán seguros, de modo que ya no tendrán que examinar el comportamiento y la intención de terceros de cerca. 
De hecho, la convivencia con ellos se someterá a una mejora notable.

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El Dragon - Lazos Afectivos y Relaciones De Pareja - 2014


Después de un año difícil, el Dragón buscará relaciones carentes de frenesí y audacia para este ciclo. 

2014 será un año para aprender a disfrutar de ser una pareja en la vida cotidiana.

Entre las personas nacidas bajo este signo, habrá muchos matrimonios e hijos serán concebidos. 

Los dragones se conectarán con el “aquí y ahora” de sus propias emociones.

La vida social frántica se apaciguarán. 
En su lugar, elegirán ser más selectivos en cuanto a su círculo de amigos y salidas.

Los dragones prefieren la vida hogareña en lugar de viajar y salir de noche, pero durante este período, el anhelo de tranquilidad y armonía con su entorno prevalecerán.


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El Conejo - Horoscopo Chino - Relaciones Afectivas 2014


Este año estaran ocupados en alguna actividad social y es posible que también encuentres ahí a tu próxima pareja. 

Tu horóscopo sentimental es bastante bueno para el 2014. 

No te apresures, presta mas atención a tus palabras y hechos, de lo contrario sería un fracaso. 

Es posible que tengas una tendencia a pelearte con tu pareja, pero debes tratar de evitar la controversia, haz todo lo posible para aguantar. 

Tu horóscopo del amor dice que tu mejor mes va a ser septiembre. 
Sin embargo, todo va a depender de tu comportamiento los meses anteriores, porque los conflictos se acarrean, lo quieras o no. La familia y la carrera son siempre las cosas más importantes en nuestras vida, no lo olvides.


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El Tigre - Pareja y Relaciones Afectivas - 2014


El año 2014 será un año marcado por emociones muy fuertes, a veces Los Tigres se sentirán vulnerables y molestos a causa de la inestabilidad de sus propios sentimientos. 

Sin embargo, este malestar temporal les dará la oportunidad de caminar otros caminos emocionales dentro de la pareja. 
Las relaciones crecerán gracias a los obstáculos. Será un año para aprender y crecer.

Los Tigres tendrán que aprender nuevas formas de relacionarse con los demás. 
Incluso si el orgullo es herido en el principio, la gente tigre pronto descubre que la búsqueda de la aprobación de los demás es simplemente absurda.


Este año van a pagar por estar equivocados, pasar desapercibido e incluso por hacer el ridículo. 
El año del caballo propone un interesante camino de autoconocimiento a través de las nuevas relaciones amistosas y de otra índole.


El Buey - Pareja y Relaciones Afectivas - Predicciones 2014



2014 será un año excelente para los bueyes, para profundizar en las relaciones de pareja, mejorar y gozar la intimidad.

El amor y la pasión fluirán espontánea y positivamente, ya que estarán más conectados con sus propios sentimientos, así como con la pareja.

Debido a una mayor receptividad, los bueyes van a emitir una poderosa sensualidad y podrán encontrar a la persona adecuada para iniciar un camino mano a mano.
La energía del caballo pondrá a gente llena de luz en tu camino, que van a acercarse a los bueyes con el fin de disfrutar de su armonía equilibrada.
Este año será bueno para la ampliación de los círculos sociales y para abrir el corazón a los nuevos amigos. Los bueyes tienen que disfrutar y aprovechar al máximo este tesoro afectiva que 2014 tiene reservado para ellos.

La Rata - Pareja y Relaciones Afectivas - 2014



Las Ratas van a experimentar una marcada necesidad de encontrar la tranquilidad y la estabilidad de sus parejas.

Ellas van a tratar de evitar las relaciones conflictivas. Sus parejas  van a tener que estar dispuestas a cumplir con las demandas de dar lo mejor, ya que la gente Rata no están muy dispuesta a ceder en sus peticiones.

Los que hacen la mayoría de sus diferencias con sus socios con el fin de madurar en lugar de alimentarse de inconformismo, disfrutarán de intensos lazos de amor sin agotar altibajos.

2014 será un año muy bueno para traer armonía a los lazos familiares, e incluso viejas heridas serán sanadas por fin, y la tensión se aliviará.
Mientras tanto, la vida social podría tener algunos altibajos debido a la actitud defensiva de las Ratas, causada por los altos sentimientos de vulnerabilidad al ser criticados.
Permitir tiempo suficiente para que los procesos de toma de decisiones será importante.


Ritmo - Filosofia Hermetica Parte III


Todo pensador apreciará debidamente la gran importancia del asunto con sólo considerar lo esclavo que, en su mayoría, la gente es de su propio estado de ánimo, sentimientos y emociones y el poco dominio de sí mismo que tienen.
A poco que se medite el asunto se comprenderá cuanto nos han afectado en nuestra vida esas oscilaciones del ritmo; como a un período de entusiasmo ha seguido un correspondiente período de depresión.
Igualmente, tenemos períodos de valor, que son seguidos de períodos de desaliento y miedo.
Y así sucede con todos o la mayoría por lo menos: marea de sentimientos y emociones se elevan y caen, pero nunca sospechan la causa de ese fenómeno.
Si se comprende la operación de este principio, se obtendrá la clave para dominar esas oscilaciones y uno podrá conocerse a sí mismo mucho mejor, evitando además el dejarse llevar por esos flujos y reflujos.
La voluntad es muy superior a la manifestación consciente de este principio, por más que el principio mismo nunca puede ser destruido.
Podremos sustraernos a sus efectos, pero, no obstante, el principio obrará.
El péndulo siempre oscila, si bien podemos evitar el ser arrastrados por su oscilación.
Existen, además, otras particularidades en la operación de este Principio del Ritmode las que vamos a hablar ahora.
Dentro de su operación entra lo que se conoce como ley de compensación.
Una de las definiciones o significados de la palabra compensación es «contrabalancear», «equilibrar», y en este sentido se emplea dicho término en la Filosofía Hermética.
A esta ley de compensación se refiere El Kybalion cuando dice: «La medida de la oscilación hacia la derecha es la misma que la de la oscilación a la izquierda; el ritmo es la compensación».
La ley de compensación es la que hace que la oscilación en una dirección determine otra oscilación en sentido contrario, y así se equilibran mutuamente.
En el Plano Físico vemos muchos ejemplos de esta ley.
El péndulo de un reloj oscila hasta cierto punto hacia la derecha y de allí vuelve a oscilar hacia la izquierda otro tanto.
Las estaciones se equilibran unas a otras de la misma manera.
Las mareas obedecen a la misma ley.
Y la misma ley se manifiesta en todos los fenómenos del Ritmo.
El péndulo que sólo hace una oscilación corta hacia la derecha, hace otra oscilación corta hacia la izquierda. Si la oscilación hacia la derecha es grande, la oscilación hacia la izquierda lo es igualmente, un objeto cualquiera arrojado hacia arriba, tiene que recorrer exactamente el mismo camino de vuelta.
La fuerza con que se lanza un proyectil hacia arriba se reproduce cuando el proyectil vuelve a la tierra.
Esta ley es constante en el Plano Físico, como cualquier referencia a la mayor autoridad científica lo corroborará.
Pero el hermético lo lleva aún más allá. Y afirma que los estados mentales están sujetos a la misma ley.
El hombre capaz de gozar agudamente, es también capaz de sufrir en igual grado.
El que sólo es capaz de escaso dolor, tampoco puede gozar más que escaso placer.
El cerdo sufre mentalmente muy poco; pero, en cambio, tampoco puede gozar gran cosa: está compensado. Por otra parte, hay animales que gozan extraordinariamente, pero también su sistema nervioso y
temperamento los hacen sufrir extremos grados de dolor. Igualmente sucede con el hombre.
Hay temperamentos que sólo son capaces de muy poco goce, pero entonces sólo existe, como
compensación, una capacidad para soportar muy poco dolor, en tanto que otros hombres pueden gozar
intensamente sufren en igual grado.
La regla es que la capacidad para el placer y el dolor en cada individuo está equilibrada.
La ley de compensación opera ampliamente aquí también.
Pero el hermético va más allá aún en esta materia, y afirma que antes de que uno pueda gozar de cierto grado de placer es necesario que haya oscilado proporcionalmente otro tanto hacia el otro polo del
sentimiento o sensación. El negativo en esta materia precede al positivo; es decir, que al experimentar cierto grado de placer no se seguirá que «haya que pagarlo» con un correspondiente grado de dolor; por el contrario, el placer es la oscilación rítmica, de acuerdo con la ley de compensación, originada por un grado de dolor experimentado previamente, bien en la vida actual o en encarnaciones anteriores.
Y esto arroja una nueva luz sobre el problema del dolor.
Los herméticos consideran la cadena de vidas como continua, como simples puertas de una sola vida del individuo, de suerte que la oscilación rítmica es considerada en esta forma, mientras que no tendría
significado alguno si no se admitiera la doctrina de la reencarnación.
Pero, además, el hermético sostiene que el maestro o el discípulo avanzado es capaz, en grado superlativo, de rehuir la oscilación hacia el dolor, realizando el proceso de neutralización a que aludiéramos
anteriormente.
Ascendiendo al plano superior del Ego,
se evitan muchas de las experiencias que llegan a los que habitan en planos inferiores.
La ley de compensación desempeña una parte importante en la vida de los hombres, pues se verá que uno generalmente paga el precio de lo que tiene o le falta. Si se posee una cosa, falta otra, y así se equilibra la balanza.
Nadie puede guardarse su centavo y tener al mismo tiempo la torta, todo tiene su lado agradable y
desagradable.
Las cosas que uno obtiene siempre las paga con las que pierde.
El rico posee mucho de lo que al pobre le falta, mientras que el pobre posee cosas que frecuentemente están fuera del alcance del rico.
El millonario que gusta de los festines, y que tiene la fortuna necesaria para satisfacer sus deseos y asegurarse la satisfacción de su gula, carece del apetito necesario para gustarlos, y envidia el apetito y la digestión del obrero a quien le falta la fortuna y la inclinación del millonario, gozando más de su sencillo alimento que el millonario sin apetito y con el estómago arruinado.
Y así sucede con todo en la vida. La ley de compensación está siempre obrando, equilibrando y contrabalanceando las cosas continuamente, en la sucesión del tiempo, aunque la oscilación del ritmo tarde vidas enteras.


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Ritmo - Filosofia Hermetica - I Parte


«Todo fluye y refluye, todo asciende y desciende; la oscilación pendular se manifiesta en todas las cosas; la medida del movimiento hacia la derecha es la misma que el de la oscilación a la izquierda; el Ritmo es la compensación.»


El Kybalion.

El Quinto Gran Principio Hermético —El Principio del Ritmo— encierra la verdad de que en todos se manifiesta una oscilación medida, movimiento de ida y vuelta, un flujo y reflujo, un movimiento semejante al del péndulo, una marea con suba y baja, manifestándose siempre entre los dos polos los planos físico, mental y espiritual.
El principio del Ritmo está estrechamente relacionado con el principio de polaridad, del cual ya hemos hablado en la entrada anterior.
El ritmo se manifiesta entre los dos polos establecidos por el principio de polaridad.
Esto no significa, sin embargo, que la oscilación rítmica vaya hasta los extremos de cada polo, pues esto sucede rarísimas veces.
En realidad, es muy difícil establecer los opuestos polares extremos en la mayoría de los casos.
Pero la oscilación es siempre «hacia» un polo primero, y después «hacia» el otro.
Siempre hay una acción y una reacción, un avance y un retroceso, una elevación y una caída, manifestándose en todas las cosas y fenómenos del universo.
Moles, mundos, hombres, animales, vegetales, minerales, energías, fuerzas, mente, y materia, y hasta el
mismo espíritu manifiestan este principio.
El principio se manifiesta en la creación y destrucción de los mundos, en la elevación y caída de las naciones, en la historia de la vida de todas las cosas y, finalmente, en los estados mentales del hombre.
Empezando por las manifestaciones del Espíritu —el Todo— se verá que siempre hay una Emanación, seguida de Absorción, «la respiración y la aspiración de Brahma», según dicen los brahmines.
Los universos se crean, alcanzan el punto más bajo de maternidad y entonces comienzan la oscilación de vuelta.
Los soles nacen, alcanzan la cumbre de su poder, empieza el progreso de su retrogresión y después de eones sin cuento se convierten en muertas masas de materia, esperando otro impulso que imparta en ellos
nuevas energías internas y que los lleve a un nuevo ciclo de vida solar.
Y así sucede con todos los mundos: nacen, crecen y mueren, sólo para renacer de nuevo.
E igualmente sucede con todas las cosas de cuerpo o forma: oscilan de la acción a la reacción, del
nacimiento a la muerte, de la actividad a la inactividad, y de nuevo comienza el ciclo.
Lo mismo pasa con todos los grandes movimientos filosóficos, credos de cualquier clase, gobiernos, naciones, etc.: nacen, crecen, llegan a su madurez, decaen, mueren, sólo para renacer de nuevo.
La oscilación pendular es evidente por doquiera.
La noche sigue al día y el día a la noche. El péndulo oscila del verano al invierno y de éste a aquél. Los corpúsculos, átomos y moléculas y todas las masas de materia, oscilan en torno del círculo que corresponde a su naturaleza. No hay tal reposo absoluto o cesación de movimiento. Todo movimiento participa del Ritmo.
Este principio es de aplicación universal.
Puede ser aplicado a cualquier cuestión o fenómeno de las muchasfases de la vida. Puede aplicarse a todas  fases de la humana actividad. Siempre existe la oscilación rítmica de un polo a otro.
El Péndulo Universal está siempre en movimiento.
Las mareas de la vida fluyen y refluyen de acuerdo con la Ley.
La ciencia moderna reconoce el principio del Ritmo, y lo considera de aplicación universal en cuanto se refiere a las cosas materiales.
Pero los herméticos llevan el principio mucho más allá y saben que sus manifestaciones se extienden a las actividades mentales del hombre, y que él solo explica la gran sucesión de sus modalidades, sentimientos y otros cambios contundentes que notamos en nosotros mismos.
Pero los herméticos, al estudiar la operación de este principio, han descubierto el modo de substraerse a las actividades mediante la Transmutación.
Los Maestros Herméticos descubrieron que en tanto que el principio del Ritmo era invariable, y evidente en todos los fenómenos mentales, había dos planos de manifestación en lo que a los fenómenos mentales concernía.
Descubrieron que había dos planos generales de conciencia, el Inferior y el Superior, y este descubrimiento les permitió elevarse al plano superior, escapando a la oscilación del péndulo rítmico, que se manifestaba en el plano inferior.
En otras palabras, la oscilación del péndulo se produce en el plano inconsciente y la conciencia no queda, por consiguiente, afectada.
A esta ley la llamaron la Ley de la Neutralización. Su operación consiste en elevar al Ego sobre las vibraciones del plano inconsciente de la actividad mental, de manera que la oscilación negativa del péndulo no se manifieste en la conciencia y no quede uno afectado por ella.
Es lo mismo que levantarse por encima de una cosa y dejar que pase esta por debajo de uno. El instructor o discípulo hermético se polariza a sí mismo en el polo requerido, y por un procedimiento semejante a
«rehusar» el participar en la oscilación retrógrada, o si se prefiere, «negando» su influencia sobre él, se mantiene firmemente en su posición polarizada, y permite al péndulo mental oscilar hacia atrás en el plano inconsciente.
Todo hombre, que en mayor o menor grado, ha adquirido cierto dominio de sí mismo, realiza esto más o menos conscientemente, impidiendo que sus modalidades o estados mentales negativos lo afecten, mediante la aplicación de la ley de la neutralización.
El maestro, sin embargo, lleva esto hasta un grado muchísimo mayor de eficacia y proficiencia, y, mediante su voluntad, llega a un grado de equilibrio e inflexibilidad mental casi imposible de concebir por aquellos que se dejan llevar y traer por el péndulo mental de sus sentimientos y modalidades.





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Ritmo - Filosofia Hermetica - Parte II


«Todo fluye y refluye, todo asciende y desciende; la oscilación pendular se manifiesta en todas las cosas; la medida del movimiento hacia la derecha es la misma que el de la oscilación a la izquierda; el Ritmo es la compensación.»
El Kybalion.
El Quinto Gran Principio Hermético —El Principio del Ritmo— encierra la verdad de que en todos se manifiesta una oscilación medida, movimiento de ida y vuelta, un flujo y reflujo, un movimiento semejante al del péndulo, una marea con suba y baja, manifestándose siempre entre los dos polos los planos físico, mental y espiritual.
El principio del Ritmo está estrechamente relacionado con el principio de polaridad, descrito en el capítulo anterior.
El ritmo se manifiesta entre los dos polos establecidos por el principio de polaridad.
Esto no significa, sin embargo, que la oscilación rítmica vaya hasta los extremos de cada polo, pues esto sucede rarísimas veces.
En realidad, es muy difícil establecer los opuestos polares extremos en la mayoría de los casos.
Pero la oscilación es siempre «hacia» un polo primero, y después «hacia» el otro.
Siempre hay una acción y una reacción, un avance y un retroceso, una elevación y una caída, manifestándose en todas las cosas y fenómenos del universo.
Moles, mundos, hombres, animales, vegetales, minerales, energías, fuerzas, mente, y materia, y hasta el
mismo espíritu manifiestan este principio.
El principio se manifiesta en la creación y destrucción de los mundos, en la elevación y caída de las naciones, en la historia de la vida de todas las cosas y, finalmente, en los estados mentales del hombre.
Empezando por las manifestaciones del Espíritu —el Todo— se verá que siempre hay una Emanación, seguida de Absorción, «la respiración y la aspiración de Brahma», según dicen los brahmines.
Los universos se crean, alcanzan el punto más bajo de maternidad y entonces comienzan la oscilación de vuelta.
Los soles nacen, alcanzan la cumbre de su poder, empieza el progreso de su retrogresión y después de eones sin cuento se convierten en muertas masas de materia, esperando otro impulso que imparta en ellos
nuevas energías internas y que los lleve a un nuevo ciclo de vida solar.
Y así sucede con todos los mundos: nacen, crecen y mueren, sólo para renacer de nuevo.
E igualmente sucede con todas las cosas de cuerpo o forma: oscilan de la acción a la reacción, del nacimiento a la muerte, de la actividad a la inactividad, y de nuevo comienza el ciclo.
Lo mismo pasa con todos los grandes movimientos filosóficos, credos de cualquier clase, gobiernos, naciones, etc.: nacen, crecen, llegan a su madurez, decaen, mueren, sólo para renacer de nuevo.
La oscilación pendular es evidente por doquiera.
La noche sigue al día y el día a la noche.
El péndulo oscila del verano al invierno y de éste a aquél.
Los corpúsculos, átomos y moléculas y todas las masas de materia, oscilan en torno del círculo que corresponde a su naturaleza.
No hay tal reposo absoluto o cesación de movimiento.
Todo movimiento participa del Ritmo.
Este principio es de aplicación universal.
Puede ser aplicado a cualquier cuestión o fenómeno de las muchas fases de la vida.
Puede aplicarse a todas las fases de la humana actividad. Siempre existe la oscilación rítmica de un polo a otro.
El Péndulo Universal está siempre en movimiento.
Las mareas de la vida fluyen y refluyen de acuerdo con la Ley.
La ciencia moderna reconoce el principio del Ritmo, y lo considera de aplicación universal en cuanto se refiere a las cosas materiales.
Pero los herméticos llevan el principio mucho más allá y saben que sus manifestaciones se extienden a las actividades mentales del hombre, y que él solo explica la gran sucesión de sus modalidades, sentimientos y otros cambios contundentes que notamos en nosotros mismos.
Pero los herméticos, al estudiar la operación de este principio, han descubierto el modo de substraerse a las actividades mediante la Transmutación.
Los Maestros Herméticos descubrieron que en tanto que el principio del Ritmo era invariable, y evidente en todos los fenómenos mentales, había dos planos de manifestación en lo que a los fenómenos mentales concernía.
Descubrieron que había dos planos generales de conciencia, el Inferior y el Superior, y este descubrimiento les permitió elevarse al plano superior, escapando a la oscilación del péndulo rítmico, que se manifestaba en el plano inferior.
En otras palabras, la oscilación del péndulo se produce en el plano inconsciente y la conciencia no queda, por consiguiente, afectada.
A esta ley la llamaron la Ley de la Neutralización.
Su operación consiste en elevar al Ego sobre las vibraciones del plano inconsciente de la actividad mental, de manera que la oscilación negativa del péndulo no se manifieste en la conciencia y no quede uno afectado por ella.
Es lo mismo que levantarse por encima de una cosa y dejar que pase esta por debajo de uno.
El instructor o discípulo hermético se polariza a sí mismo en el polo requerido, y por un procedimiento semejante a «rehusar» el participar en la oscilación retrógrada, o si se prefiere, «negando» su influencia sobre él, se mantiene firmemente en su posición polarizada, y permite al péndulo mental oscilar hacia atrás en
el plano inconsciente.
Todo hombre, que en mayor o menor grado, ha adquirido cierto dominio de sí mismo, realiza esto más o menos conscientemente, impidiendo que sus modalidades o estados mentales negativos lo afecten, mediante la aplicación de la ley de la neutralización.
El maestro, sin embargo, lleva esto hasta un grado muchísimo mayor de eficacia y proficiencia, y, mediante su voluntad, llega a un grado de equilibrio e inflexibilidad mental casi imposible de concebir por aquellos que se dejan llevar y traer por el péndulo mental de sus sentimientos y modalidades.


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San Gabriel De La Dolorosa


Religioso Pasionista.
Festividad: 27 de febrero.
Fecha de beatificación: 31 de mayo de 1908.
Fecha canonización: 13 de mayo de 1920 por el papa Benedicto XV.
Patrón de: región de Abruzzo (Italia), Acción Católica, clérigos, estudiantes, jóvenes en general.
Nacionalidad: italiana.


Historia

A los 4 años quedó huérfano de madre. El papá, que era un excelente católico, se preocupó por darle una educación esmerada, mediante la cual logró ir dominando su carácter fuerte que era muy propenso a estallar en arranques de ira y de mal genio.
Tuvo la suerte de educarse con dos comunidades de excelentes educadores: los Hermanos Cristianos y los Padres Jesuitas; y las enseñanzas recibidas en el colegio le ayudaron mucho para resistir los ataques de sus pasiones y de la mundanalidad.
El joven era sumamente esmerado en vestirse a la última moda. Y sus facciones elegantes y su fino trato, a la vez que su rebosante alegría y la gran agilidad para bailar , lo hacían el preferido de las muchachas en las fiestas. Su lectura favorita eran las novelas, pero le sucedía como en otro tiempo a San Ignacio, que al leer novelas, en el momento sentía emoción y agrado, pero después le quedaba en el alma una profunda tristeza y un mortal hastío y abatimiento. Sus amigos lo llamaban "el enamoradizo". Pero los amores mundanos eran como un puñal forrado con miel". Dulces por fuera y dolorosos en el alma.
En una de las 40 cartas que de él se conservan, le escribe a un antiguo amigo, cuando ya se ha entrado de religioso: "Mi buen colega; si quieres mantener tu alma libre de pecado y sin la esclavitud de las pasiones y de las malas costumbres tienes que huir siempre de la lectura de novelas y del asistir a teatros donde se dan representaciones mundanas. Mucho cuidado con las reuniones donde hay licor y con las fiestas donde hay sensualidad y huye siempre de toda lectura que pueda hacer daño a tu alma. Yo creo que si yo hubiera permanecido en el mundo no habría conseguido la salvación de mi alma. ¿Dirás que me divertí bastante? Pues de todo ello no me queda sino amargura, remordimiento y temor y hastío. Perdóname si te di algún mal ejemplo y pídele a Dios que me perdone también a mí".
Al terminar su bachillerato, y cuando ya iba a empezar sus estudios universitarios, Dios lo llamó a la conversión por medio de una grave enfermedad. Lleno de susto prometió que si se curaba de aquel mal, se iría de religioso. Pero apenas estuvo bien de salud, olvidó su promesa y siguió gozando del mundo.
Un año después enferma mucho más gravemente. Una laringitis que trata de ahogarlo y que casi lo lleva al sepulcro. Lleno de fe invoca la intercesión de un santo jesuita martirizado en las misiones y promete irse de religioso, y al colocarse una reliquia de aquel mártir sobre su pecho, se queda dormido y cuando despierta está curado milagrosamente. Pero apenas se repone de su enfermedad empieza otras vez el atractivo de las fiestas y de los enamoramientos, y olvida su promesa. Es verdad que pide ser admitido como jesuita y es aceptado, pero él cree que para su vida de hombre tan mundano lo que está necesitando es una comunidad rigurosa, y deja para más tarde el entrar a una congregación de religiosos.
Estalla la peste del cólera en Italia. Miles y miles de personas van muriendo día por día. Y el día menos pensado muere la hermana que él más quiere. Considera que esto es un llamado muy serio de Dios para que se vaya de religioso. Habla con su padre, pero a éste le parece que un joven tan amigo de las fiestas mundanas se va a aburrir demasiado en un convento y que la vocación no le va a durar quizá ni siquiera unos meses.
Pero un día asiste a una procesión con la imagen de la Virgen Santísima. Nuestro joven siempre le ha tenido una gran devoción a la Madre de Dios (y probablemente esta devoción fue la que logró librarlo de las trampas del mundo) y en plena procesión levanta sus ojos hacia la imagen de la Virgen y ve que Ella lo mira fijamente con una mirada que jamás había sentido en su vida. Ante esto ya no puede resistir más. Se va a donde su padre a rogarle que lo deje irse de religioso. El buen hombre le pide el parecer al confesor de su hijo, y recibida la aprobación de este santo sacerdote, le concede el permiso de entrar a una comunidad bien rígida y rigurosa, los Padres Pasionistas.
Al entrar de religioso se cambia el nombre y en adelante se llamará Gabriel de la Dolorosa. Gabriel, que significa: el que lleva mensajes de Dios. Y de la Dolorosa, porque su devoción mariana más querida consiste en recordar los siete dolores o penas que sufrió la Virgen María. Desde entonces será un hombre totalmente transformado.
Gabriel había gozado siempre de muchas comodidades en la vida y le había dado gusto a sus sentidos y ahora entra a una comunidad donde se ayuna y donde la alimentación es tosca y nada variada. Los primeros meses sufre un verdadero martirio con este cambio tan brusco, pero nadie le oye jamás una queja, ni lo ve triste o disgustado.
Gabriel lo que hacía, lo hacía con toda el alma. En el mundo se había dedicado con todas sus fuerzas a las fiestas mundanas, pero ahora, entrado de religioso, se dedicó con todas las fuerzas de su personalidad a cumplir exactamente los Reglamentos de su Comunidad. Los religiosos se quedaban admirados de su gran amabilidad, de la exactitud total con la que cumplía todo lo que se le mandaba, y del fervor impresionante con el que cumplía sus prácticas de piedad.
Su vida religiosa fue breve. Apenas unos seis años. Pero en él se cumple lo que dice el Libro de la Sabiduría: "Terminó sus días en breve tiempo, pero ganó tanto premio como si hubiera vivido muchos años".
Su naturaleza protestaba porque la vida religiosa era austera y rígida, pero nadie se daba cuenta en lo exterior de las repugnancias casi invencibles que su cuerpo sentí ante las austeridades y penitencias. Su director espiritual sí lo sabía muy bien.
Al empezar los estudios en el seminario mayor para prepararse al sacerdocio, leyó unas palabras que le sirvieron como de lema para todos sus estudios, y fueron escritas por un sabio de su comunidad, San Vicente María Strambi. Son las siguientes: "Los que se preparan para ser predicadores o catequistas, piensen mientras estudian, que una inmensa cantidad de pobres pecadores les suplica diciendo: por favor: prepárense bien, para que logren llevarnos a nosotros a la eterna salvación". Este consejo tan provechoso lo incitó a dedicarse a los estudios religiosos con todo el entusiasmo de su espíritu.
Cuando ya Gabriel está bastante cerca de llegar al sacerdocio le llega la terrible enfermedad de la tuberculosis. Tiene que recluirse en la enfermería, y allí acepta con toda alegría y gran paciencia lo que Dios ha permitido que le suceda. De vómito de sangre en vómito de sangre, de ahogo en ahogo, vive todo un año repitiendo de vez en cuando lo que Jesús decía en el Huerto de los Olivos: "Padre, si no es posible que pase de mí este cáliz de amargura, que se cumpla en mí tu santa voluntad".
La Comunidad de los Pasionistas tiene como principal devoción el meditar en la Santísima Pasión de Jesús. Y al pensar y repensar en lo que Cristo sufrió en la Agonía del Huerto, y en la Flagelación y coronación de espinas, y en la Subida al Calvario con la cruz a cuestas y en las horas de mortal agonía que el Señor padeció en la Cruz, sentía Gabriel tan grande aprecio por los sufrimientos que nos vuelven muy semejantes a Jesús sufriente, que lo soportaba todo con un valor y una tranquilidad impresionantes.
Pero había otra gran ayuda que lo llenaba de valor y esperanza, y era su fervorosa devoción a la Madre de Dios. Su libro mariano preferido era "Las Glorias de María", escrito por San Alfonso, un libro que consuela mucho a los pecadores y débiles, y que aunque lo leamos diez veces, todas las veces nos parece nuevo e impresionante. La devoción a la Sma. Virgen llevó a Gabriel a grados altísimos de santidad.
A un religioso le aconsejaba: "No hay que fijar la mirada en rostros hermosos, porque esto enciende mucho las pasiones". A otro le decía: "Lo que más me ayuda a vivir con el alma en paz es pensar en la presencia de Dios, el recordar que los ojos de Dios siempre me están mirando y sus oídos me están oyendo a toda hora y que el Señor pagará todo lo que se hace por él, aunque sea regalar a otro un vaso de agua".
Y el 27 de febrero de 1862, después de recibir los santos sacramentos y de haber pedido perdón a todos por cualquier mal ejemplo que les hubiera podido dar, cruzó sus manos sobre el pecho y quedó como si estuviera plácidamente dormido. Su alma había volado a la eternidad a recibir de Dios el premio de sus buenas obras y de sus sacrificios. Apenas iba a cumplir los 25 años.
Poco después empezaron a conseguirse milagros por su intercesión y en 1926 el Sumo Pontífice lo declaró santo, y lo nombró Patrono de los Jóvenes laicos que se dedican al apostolado.
San Gabriel de la Dolorosa: pídele a la Sma. Virgen por tantos jóvenes tan llenos de vitalidad y de entusiasmo para que encaucen las enormes fuerzas de su alma, no a dejarlas perderse en goces mundanos, sino a ganarse un gran premio en el cielo dedicándose a salvar su propia alma y la de muchos más.

Oracion I

¡Oh bienaventurado Gabriel de la Dolorosa, que, por vuestra afectuosísima devoción a la ínclita Virgen afligida al pié de la cruz, llegasteis a ser espejo de inocencia, modelo de santidad y taumaturgo del presente siglo por los estupendos milagros obrados en derredor de vuestro sepulcro! Dignaos mirarme benévolo desde el cielo y recabadme de la munificencia divina las fuerzas que he menester para precaver los peligros del alma, despreciar los halagos del mundo, neutralizar las asechanzas del demonio, triunfar de mis pasiones, llorar contrito mis culpas, secundar con generosidad de corazón las divinas inspiraciones y labrar mi santificación mediante un afecto sincero a la Pasión de Jesús y a los Dolores de mi Madre Maria, a fin de que, siguiendo vuestros ejemplos aquí en la tierra, pueda igualmente haceros compañia en el cielo por toda la eternidad. Así sea.

Oracion II

Oh Dios, que enseñaste a san Gabriel de la Dolorosa a meditar asiduamente los dolores de tu dulcísima Madre, y le concediste alcanzar por ella las cumbres de la santidad. Concédenos a nosotros, por tu intercesión y ejemplo, vivir tan unidos a tu Madre Dolorosa que gocemos siempre de su maternal protección. Tú, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.



Fuentes Consultadas
El Devocionario
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San Damian De Malokai


Festividad: 10 de mayo
Orden: sacerdote de la Congregación de los Sagrados Corazones
Nacionalidad: belga
Fecha beatificación: 3 de junio de 1995 por el Papa Juan Pablo II
Fecha canonización: 11 de octubre de 2009 por el Papa Benedicto XVI
Patrón: enfermos de lepra

Historia

Se llamaba Jozef Van Veuster, pero todos los conocemos como el Padre Damián de Molokai. Nació el 3 de enero de 1840, en Tremeloo, Bélgica. Lo han llamado "el leproso voluntario", porque con tal de poder atender a los leprosos que estaban en total abandono, aceptó volverse leproso como ellos.

De pequeño en la escuela ya gozaba haciendo como obras manuales, casitas como la de los misioneros en las selvas. Tenía ese deseo interior de ir un día a lejanas tierras a misionar.

De joven fue arrollado por una carroza, y se levantó sin ninguna herida. El médico que lo revisó exclamó: "Este muchacho tiene energías para emprender trabajos muy grandes".

Un día, siendo apenas de ocho años dispuso irse con su hermanita a vivir como ermitaños en un bosque solitario, a dedicarse a la oración. El susto de la familia fue grande cuando notó su desaparición. Afortunadamente unos campesinos los encontraron por allá y los devolvieron a casa. La mamá se preguntaba: ¿qué será lo que a este niño le espera en el futuro?

A los 17 años José estudia comercio y francés en Braine le Compte para
ayudar a su padre en el negocio del grano. Cada atardecer visitaba el sagrario de alguna iglesia. Entró un día en su parroquia cuando predicaba un misionero redentorista: «Los goces de este mundo pasan pronto... Lo que se sufre por Dios permanece para siempre... El alma que se eleva a Dios arrastra en pos de sía otras almas... Morir por Dios es vivir verdaderamente y hacer vivir a los demás». No dejó para mañana su sí.
A su padre la noticia le derrumbó sus planes. Pero vino a decir si Dios cuenta contigo... El primero. Y el día 3 de enero de 1859 él mismo acompañaba a su hijo al convento de los Sagrados Corazones de Lovaina. A los 19 años tenía una vocación decidida y estaba bien dotado: inteligente, dinámico, afable, robusto y hasta guapo, el joven causó buena impresión. Pero, ¿sacerdote? Demasiado mayor para aprender latín y Humanidades. Será un buen hermano coadjutor. José acepta tranquilo y confía en Dios. El 2 de febrero de 1859 viste el hábito con el nombre de Damián. A todos admira su actividad: tan pronto arregla un tejado como cura la vaca del vecino, como... ¡estudia latín! A marchas forzadas. Su hermano ha obtenido permiso para enseñarle en horas extras y pronto se le verá en la fila de los aspirantes al sacerdocio.

Todas las noches iba a postrarse ante un cuadro de San Francisco Javier. Un día, lo sorprendió el padre Maestro: ¿Qué hace aquí a estas horas? Le pido que me obtenga la gracia de ser misionero. Su «impaciente» gemelo navarro actuó rápido. En Teología estaba cuando llegó a Europa el Vicario apostólico de Hawai, con el fin de reclutar sacerdotes. Uno de los elegidos fue el padre Pánfilo, el cual, en vísperas de la partida, enfermó de tifus asistiendo a los apestados de Lovaina. El padre Damián pidió y obtuvo sustituirle. Acto seguido el padre Pánfilo sanó, favor que el padre Damián fue a agradecer al santuario de Monteagudo. Allí, al amanecer, ante la tierna mirada de María, anegados los ojos en lágrimas, dio un último y apretado abrazo a sus padres.
Se cuenta que en los 140 días de navegación arreciaron tormentas. Los pasajeros, hechos unas “sopas”, pero el padre Damián no tuvo tiempo de marearse, ocupado con sus prácticas de enfermero.

Su primera conquista.
En 1863 zarpó hacia su lejana misión en el viaje se hizo sumamente amigo del capitán del barco, el cual le dijo: "yo nunca me confieso. soy mal católico, pero le digo que con usted sí me confesaría". Damián le respondió: "Todavía no soy sacerdote pero espero un día, cuando ya sea sacerdote, tener el gusto de absolverle todos sus pecados". Años más tarde esto se cumplirá de manera formidable.

El día 19 de marzo de 1865, pisaban tierra de Hawai. Dos meses después, José Damián era ordenado sacerdote y cantaba su primera Misa en la catedral de Honolulu. A continuación, enviado a una pequeña isla de Hawai. Las Primeras noches las pasó debajo de una palmera, porque no tenía casa para vivir. Casi todos los habitantes de la isla eran protestantes. Con la
ayuda de unos pocos campesinos católicos construyó una capilla con techo de paja; y allí empezó a celebrar y a catequizar. Luego se dedicó con tanto cariño a todas las gentes, que los protestantes se fueron pasando casi todos al catolicismo.
Fue visitando uno a uno todos los ranchos de la isla y acabando con muchas creencias supersticiosas de esas pobres gentes y reemplazándolas por las verdaderas creencias. Llevaba medicinas y lograba la curación de numerosos enfermos. Pero había por allí unos
que eran incurables: eran los leprosos.

Primer destino: Puna, territorio vastísimo de la isla de Molokai. Después Kohala, región casi tan grande como Bélgica entera, montañosa y sin vías de comunicación. A pie, a caballo, en barca canaca ligero tronco ahuecado , a nado, escalando... recorría horas y horas de intrincado camino por montes, breñas, torrenteras y selva, de caserío en caserío, bajo aquel cielo tropical. No faltó algún que otro naufragio serio, en aquel mar «casi siempre alborotado». Nueve años de aventuras que podrían llenar espléndidos tomos.
Algunas tardes eran más tranquilas. Se sentaba a la puerta de una cabaña y los canacas, apiñados a su alrededor, le escuchaban encandilados. Refiere el padre Carmelo Arbiol que «el padre les hablaba con tanta unción, con tanto afecto de nuestro Señor, de la bondad de Dios y de la fealdad y malicia del pecado, queáquella gente delicada se sentía conmovida. De todas partes acudían... Hasta los mismos leprosos salían de sus escondites y, arrastrándose, iban a participar de aquella amena e instructiva distracción». Éste fue el primer contacto que el padre Damián tuvo con ellos.
Las capillas de paja pronto quedaron pequeñas y además volaban cuando se producían vendavales. ¡Manos a la obra! Las de los canacas, entusiasmados, y las del padre Damián, entusiasmado y entusiasmador, actuando de maestro y peón. Dicen y nos lo creemos que se reservaba para sí la peor parte. Después de una capilla, otra y otra... Las inauguraciones fueron sonadas. A continuación vinieron las escuelas. Sin edificios ni maestros católicos, los neófitos tenían que acudir a las de los protestantes. No tardó en conseguir la financiación de ¡cuatro escuelas católicas!
    Un testimonio de su propio tintero se refiere a una fiesta con motivo de la visita del prelado: «Se organizó una piadosa procesión con el Santísimo... solemne y conmovedora. Antes tuvimos el consuelo de lograr la conversión general y sincera de nuestros antiguos cristianos. Durante dos meses permanecí  casi constantemente en el confesionario, oyendo confesiones... El esplendor de nuestras ceremonias impresionó profundamente tanto a los herejes corno a los idólatras... Muchos a raíz de las fiestas se hicieron inscribir en el catálogo de los catecúmenos».


El monstruo

Los habitantes de Hawai vivían apacibles disfrutando de la fecundidad y belleza de la naturaleza, hasta que apareció alrededor de 1850 el terrible monstruo: la lepra. Alarmado el Gobierno por su rápida difusión, favorecida por el clima, decidió confinar a los leprosos. El lugar elegido fue una lengua de tierra de la isla de Molokai, adentrada en el mar unos cinco kilómetros y separada del resto de la isla por una muralla de escarpados montes. Allí desembarcaban las redadas de leprosos, paganos, protestantes y católicos. Cristo doblemente destrozado. Abandonados, sin asistencia sanitaria ni espiritual, intentaban ahogar su desesperación en bacanales y desórdenes. Cundieron los rumores por la capital de que aquello era un «verdadero infierno». El obispo, monseñor Louis Maigret, de los Sagrados Corazones, realizó allí una visita pastoral. Quedó horrorizado. Buscó una ocasión propicia para reunir a sus misioneros y les expuso la situación. El padre Damián se adelantó: “Pido ser enviado”, dijo. Tenía 33 años y era consciente del riesgo que entrañaba su decisión.
Seis días después, el 10 de mayo de 1873, llegaba el padre Damián, acompañado de su obispo, a Kalawao. En la playa esperaba una multitud de rostros desfigurados. Muchos sin orejas, sin nariz, sin ojos... En cuanto el padre Damián puso pie en tierra se oyeron fuertes gritos: ¡Aloha, Makúa Karninao! Eran los antiguos feligreses de Kohala. Al atardecer el prelado saltaba a la canoa que le llevó hasta el Kilouea. Pronto fue un punto lejano y se perdió en el horizonte. El padre Damián quedaba con Dios y sus leprosos. Llegada la noche, se arrodilló, rezó el rosario y se acomodó bajo las ramas de un corpulento pándano. Estaba hecho a dormir en la intemperie.

Signo de contradicción
En Honolulu, la noticia de que el padre Damián se había ofrecido a «vivir y morir con los leprosos» corría de boca en boca. A unos les rindió la admiración, a otros se les achicaron los ojos. De los primeros fueron los periódicos protestantes Advertíser y Muhou, que aplaudieron al héroe católico. Esto molestó a algunos pastores calvinistas que tacharon la empresa de «temeraria. Imprudente, provocación y reto» y consiguieron indisponer a la Comisión de Higiene contra el padre Damián y la prohibición drástica, bajo pena de arresto, de salir de la isla.
El padre Modesto Favens, provincial de la misión, que quería entrañablemente al padre Damián, quiso visitarle. Llegado a su destino, no le fue permitido acercarse a la isla. Avisado el padre Damián por un piragüero, se lanzó a los remos y en pocos minutos llegaba al Kilouea e intentaba subir al puente. ¡Largo de aquí rugió el capitán . Tengo órdenes termínantes. Entonces tuvo lugar esta escena conmovedora: A la vista de todos, el padre Damián se arrodilló y desde la barquichuela, vapuleada por el borrascoso mar, se confesó en alta voz y recibió la absolución.

Mi madre no me reconocería por hijo suyo»

Un cambio de gobierno, sin mayoría calvinista el nuevo, libró al padre Damián de la encarnizada persecución que estaba sufriendo. El padre provincial le responsabilizó entonces de toda la isla de Molokai, lo que significaba necesariamente tramontar los acantilados. Mejoró también la situación de los leprosos. Fue nombrado un delegado lazareto, el cual dio todas las facilidades al padre Damián e incluso le brindó el cargo de superintendente con un sueldo de diez mil dólares anuales. Su respuesta fue tajante: «Aunque me ofrecieran todos los tesoros de la tierra no permanecería ni cinco minutos en la isla de Molokai. Lo que a mí me retiene aquí es tan sólo Dios y la salvación de las almas. Si aceptase por mi trabajo el mas insignificante salario, mi madre no me reconocería como hijo suyo».
En los asentamientos de Kalaupapa, vivían unos 600 leprosos. El padre Damián comenzó por levantar una iglesia y constituir una parroquia, dedicada a santa Filomena. Como dijo Juan Pablo II en la homilía de la beatificación, creía realmente «en la divinidad de Jesucristo» y vivía su fe, no de boca sino con obras, como insta san Pablo. «Rendido de amor a Jesús», derrochó amor y actividad apostólica, y consiguió regenerar la maltrecha convivencia social en la «colonia de la muerte».
Nos podriamos preguntar con el padre Raymond: «¿Creemos cuanto declaramos creer?». El mundo cambiaría si todos los católicos nos decidiéramos a vivir realmente la fe que proclamamos.



Con el máximo amor

En una tenebrosa noche de 1874, un terrible huracán azotó la isla de Molokai. Entre los aullidos viento se oían los gritos lastimeros de los leprosos. El padre Damián, a tientas, agarrándose donde podía, metiéndose en hoyos y charcos que le cubrían, acudía a socorrerlos y auxiliarlos. El día iluminó el poblado totalmente devastado. Los leprosos buscaban entre los escombros algún resto aprovechable. Ni una barraca en pie. El padre Damián obtuvo materiales y... otra vez maestro y peón, supliendo ahora muchos brazos y piernas mutilados. Blancos, alegres y en perfecta alineación, pronto relucieron al sol los nuevos bungalows. Después vino la instalación de agua corriente. Como una madre se preocupaba de que en invierno no faltara ropa de abrigo. Si los alimentos no llegaban a tiempo: Karniano nos ayudará.
Médico y enfermero, preparaba las medicinas que él mismo se había procurado, limpiaba los miembros carcomidos, los vendaba y amputaba si era necesario. «Como si manipulara rosas», según un testigo. Su sonrisa animosa y franca disfrazaba la respiración contenida y las náuseas. Si la visita coincidía con las comidas, era inevitable la invitación. Se sentaba entonces en el suelo y comía tranquilamente léase: con vencimiento heroico el poi en la calabaza familiar. Todos metían allí los dedos, «hinchados, abiertos y llenos de pus y sangre como los pinta su sucesor. Después, la ineludible chupada en la «pipa de la amistad», en boquilla única. Hoy se sabe que el bacilo de Hansen no se contagia por contacto, sino por la saliva y mucosidades.
    Cuando morían, los acompañaba hasta el
último momento. Se cuenta que enterró de su propia mano a 1.500, además de fabricar los ataúdes y cavar las fosas. Y aún después de muertos: «Por la noche, me paseo entresus tumbas rezando el rosario y meditando en la eterna felicidad que muchos de ellos están ya disfrutando».


«No hay dolor que merezca ser amado en sí”, dice san Agustín. Y «no es posible que haya alguien verdadera y sinceramente misericordioso que desee haya miserables para tener de quien compadecerse» (Confesiones, L 3, 2,3). Así lo entendía el padre Damián, que luchó con todas sus fuerzas para aniquilar el monstruo. Cinco años estuvo estudiando un tratamiento, con notables resultados.

No es todo. Falta el capítulo de las diversiones: carreras de caballos, en las que participaba, un orfeón de primera que cantaba en la iglesia, una banda de música, una especie de rondalla que hacía el pasacalle los domingos y enganchaba bulliciosamente a todos los leprosos... Se acabaron las antiguas bacanales.
Para el culto, nada escatimaba: flores, luces, ornamentos, que le proporcionaban sus hermanas de los Sagrados Corazones, de Honolulu. Las Misas, solemnísimas. Un visitante se
emocionó hasta las lágrimas cuando «en el momento de comulgar vi levantarse a toda aquella muchedumbre la cual, dirigiéndose con toda lentitud al altar, se iba arrodillando en la sagrada mesa». Quien de los monaguillos, vestidos de martirial blanquirrojo, en contraste sus caritas deformes y a la vez risueñas. De campanillas eran también las procesiones eucarísticas. Otro testimonio: «Toda la leprosería se hallaba allí reunida. Los mismos protestantes formaban en las filas, o bien se descubrían con respeto al paso de la custodia... En un momento dado, todos aquellos leprosos entonaron el Lauda Sion».
Instituyó la Adoración Perpetua Reparadora. ¡Qué sonrisas las de Jesús, siempre acompañado de sus amigos los leprosos! Ninguno faltaba a la cita: «Los que no pueden ir a la capilla, hacen la adoración en el lecho del dolor».
Junto con su actividad inagotable, oraba, pedía oraciones, catequizaba sin perder baza. Y aún no sabemos qué disciplinas añadiría, pero sí que dijo: «No es posible lograr conversiones si no es haciendo penitencia. Nosotros debemos merecer por los pecadores la gracia de la conversión y tomar sobre nuestras espaldas una parte de la penitencia que ellos no están en condiciones de hacer».
«Mucho amor se pierde en el mundo fuera de la verdad», decía Maritain. El padre Damián ofreció la verdad con el máximo amor: se dio en sacrificio total.

¿Su secreto?


No es tal, porque el padre Damián lo dijo, lo repitió y lo volvió a repetir: «Si yo no encontrase a Jesús en la Eucaristía, mi vida sería insoportable» (1881). «Al pie del Sagrario es donde encuentro alivio en mis pesares y consuelo en mis penas interriores». «A no ser por la presencia permanente de nuestro divino Maestro en mi humilde capillita, no me hubiera sido posible perseverar».

Sólo sacerdote católico

La noticia de la heroicidad del padre Damián la difundieron los grandes diarios de Europa y de América, y le llovieron apoyos y ayudas de todo el mundo. De católicos y, lo que es más admirable, de protestantes de Inglaterra, Suecia, Alemania. La regente del archipiélago quiso ver con sus propios ojos lo que era comidilla de la corte. Se conmovió. Pocos días después, enviaba al padre Damián el diploma y condecoración de Comendador de la Orden Real de Kalalaúa. La aceptó y agradeció «como prueba de la unión y buenas relaciones que existen entre la familia real y la Iglesia católica». Y así firmaba: «P Damián de Veuster, sacerdote católico romano».
Médico, constructor, carpintero, herrero, agricultor, jardinero, músico.... pero siempre y sobre todo sacerdote de Cristo.

Leproso por cinco años

Sucedió lo que era de esperar. 1879: unos dolorcillos y manchas sospechosas, atajados con el sublimado corrosivo. 1881 84: reaparecen y progresan. Una tarde, de vuelta de una larga correría apostólica por mar y montaña, se siente extenuado. Pide ayuda: un baño caliente para sus pies. Cuidado, que el agua está muy caliente, le advierte la leprosa que se la proporciona. Él, con precaución, toca el agua con la punta del pie y la encuentra normal. Sumerge los pies y no nota nada, pero al punto se le llenan de ampollas, completamente escaldados. La insensibilidad es un indicio claro de lepra. El padre Damián escribe a su obispo: «Pronto estaré completamente desfigurado. No tengo ninguna duda sobre la naturaleza de mi enfermedad. Estoy sereno y feliz en medio de mi gente». Y en medio de su gente continuará trabajando hasta que le quede un hilo de energía. Un año antes de su muerte reconstruía la iglesia de Santa Filomena, derribado el campanario (1888) por un huracán. El padre Corneille se admiró de verle encaramado en la techumbre, en plena actividad.

Grandes fueron los dolores en su cuerpo, atroces los que angustiaron su alma en los últimos días de su vida. Soportó incomprensiones, críticas, las más crueles calumnias de propios y extraños. El 2 de febrero de 1889 escribe al señor Clifford: «Lentamente, pero sin tregua ni descanso, voy subiendo la cuesta con mi cruz. Muy en breve espero verme ya en la cima del Calvario». Y, entre sus notas, se halló esta frase de san Juan de la Cruz: «¡Señor, sufrir aún más por vuestro amor y ser aún más despreciado!».
No le faltó, eso sí, en los últimos tiempos, el consuelo deseado: un compañero con quien poder confesarse. Sucesivamente lo fueron el sacerdote belga Conrardy, el padre Alberto Montiton, el padre Wendelin Moellers, sucesor suyo, a quien se debe el testimonio de sus últimos momentos.
También le ayudó el hermano José Dutton, oficial del ejército norteamericano, protestante convertido al catolicismo, quien, agradecido, quiso quemar su vida en Molokai, junto al padre Damián, cuyas proezas había leído en la prensa de su país.
Y, por fin, en noviembre de 1888, llegaron tres religiosas franciscanas de Siracusa, Estados Unidos, para encargarse del hospital para niñas leprosas, una construcción más del padre Damián. Al frente de ellas, la madre Mariana Cope, beatificada por Benedicto XVI el 14 de mayo de 2005. Al enterarse el padre Damián de su llegada exclamó: «Ahora ya puedo morir tranquilo. Mi tiempo ha pasado, pero mi obra vivirá una vida más próspera que nunca».

Sorpresa final.
Poco antes de que el gran sacerdote muriera, llegó a Molokai un barco. Era el del capitán que lo había traído cuando llegó de misionero. En aquél viaje le había dicho que con el único sacerdote con el cual se confesaría sería con él. Y ahora, el capitán venía expresamente a confesarse con el Padre Damián. Desde entonces la vida de este hombre de mar cambió y mejoró notablemente. También un hombre que había escrito calumniando al santo sacerdote llegó a pedirle perdón y se convirtió al catolicismo.
Hacia el Cielo
El 15 de abril de 1889, entraba en la eternidad. Al recibir la unción sagrada había exclamado: «¡Cuán dulce se me hace morir cuando pienso que muero hijo de los Sagrados Corazones!». Tenía 49 años, y 16 habían pasado desde que se presentara a los leprosos de Molokai: «Permanecerá con vosotros hasta la muerte. Mi vida será vuestra vida, mi pan será vuestro pan. Y si el buen Dios lo quiere, quizá vuestra enfermedad será un día la mía». Dejaba aquel «reino fétido de cadáveres vivientes» convertido en granja de recreo y jardín perfumado con su santidad, que Dios quiso patentizar con un milagro inmediato: al punto de morir desaparecieron las señales de la lepra y se secaron las llagas de sus manos.
El padre Damián es el patrón espiritual de los leprosos, de los enfermos de SIDA, de los marginados y del Estado de Hawai. El 1 de diciembre de 2005, el Padre Damián fue elegido "el belga más grande de todos los tiempos" por la televisión flamenca (VRT). Juan Pablo II le beatificó el 4 de junio de 1995. Benedicto XVI lo canonizó el 11 de octubre de 2009 en Roma.  Su fiesta se celebra el 15 de abril.

Que San Damián de Molokai nos ayude a comprender, como él, que «el alma que se eleva a Dios arrastra en pos de sí a las otras almas que la rodean». Y que la muerte es un dulce despertar cuando se ha vivido en los Corazones de Jesús y de María.

La Madre Teresa de Calcuta, premio Nóbel de la Paz, presentó al Papa Juan Pablo II más de un millón de firma de leprosos pidiéndole la beatificación del Padre Damián. En 1995, el Papa Juan Pablo II, después de haber comprobado milagros obtenidos por la intercesión de este gran misionero, lo declaró beato, y patrono de los que trabajan entre los enfermos de lepra.

Su restos mortales fueron trasladados en 1936 a Bélgica y reposan en la iglesia de la Congregación en Lovaina. Cuando en 1959 Hawai llegó a ser el estado número 50 de la Unión Americana, los representantes del pueblo hawaiano escogieron a Damián para que su estatua les representara en el Capitolio de Washington.


El belga más grande de todos los tiempos
El 3 de mayo de 1936 entraba majestuoso el "Mercator" en el puerto de Amberes. Una multitud expectante esperaba en silencio que el buque atracara en su muelle. Junto a esta masa de gente sencilla se encontraba el rey Leopoldo III y su gobierno; el cardenal primado Van Roey y los obispos de Bélgica. Eran las 3 de la tarde cuando las ululantes sirenas comenzaron a sonar mezcladas con los gritos y los vítores del gentío. Bélgica sabía que estaba recibiendo a su héroe.

"El héroe más sublime de la caridad cristiana", como había dicho el Primado. Antes, el presidente Roosevelt en carta al rey belga había dicho: “...con razón le consideramos un héroe nacional “. En procesión, escoltado por el pueblo y sus hermanos religiosos, llegó a su reposo definitivo en Lovaina.

Sesenta y nueve años después, una encuesta nacional en la que han participado miles de belgas eligió, en diciembre de 2005, al padre Damián como el belga más grande de su historia.

Desde su independencia (proclamada el 20 de diciembre de 1830), Bélgica ha tenido personas destacadas en todos los ámbitos de la actividad humana, sin embargo a la hora de elegir a su hijo más grande, el pueblo se ha inclinado por un sencillo religioso que protagonizó en el siglo XIX una gesta humana y religiosa impresionante. Para medir la grandeza, el pueblo tiene un olfato especial.

Y lo que hizo Damián, encerrándose vivo para compartir los sufrimientos y dolores de miles de leprosos encerrados forzosamente en la isla de Molokai, no deja indiferente a los hombres y mujeres de buena voluntad.

Gandhi había dicho que el mundo cuenta con pocos héroes comparables al padre Damián de Molokai. Bélgica, su país, lo ha proclamado como el más grande de su historia.

Oracion I

Glorioso y venerado San Damián: Sois modelo y patrono de los leprosos. Por vuestro amor os entregasteis en cuerpo y alma al cuidado de los leprosos de Molokai. Yo, impulsado por la confianza que me inspira tu valimiento poderoso ante Dios y tu caridad hacia los más necesitados, acudo a ti. Llena mi corazón de amor hacia los más necesitados, alcánzame un gran espíritu de fe, saber aceptar y ofrecerte todas las contrariedades de la vida y poder gozar un día de vuestra compañía en el cielo. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Oracion II

Oh dulcísimo Jesús, que con tus palabras y tus ejemplos nos has predicado tan elocuentemente el precepto de amar al prójimo, dígnate glorificar esa misma caridad cristiana, coronando con la aureola de los Santos a tu siervo san Damián que, inflamado en tu amor, quiso vivir y morir al servicio de los pobres leprosos de Molokai.
Un padrenuestro y cinco avemarías pidiendo el reinado del Sagrado Corazón diciendo tres veces estas jaculatorias:
"Corazón divino de Jesús, venga a nosotros tu Reino".
"María, Reina de los Apóstoles, ruega por nosotros."




Fuentes Consultadas
Revista Ave Maria n 744
El Devocionario
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