5 de noviembre de 2017

Famosas Visiones Historicas de Angeles - Primera Parte -



En esta sección se incluyen relatos de algunas de las visiones angélicas mas famosas ocurridas a lo largo de la historia, tomadas de las palabras de Ezequiel, Enoch, San Juan y Daniel.
Incluyen visiones del mas alto cielo que contiene el trono de Dios.


Seguí contemplando hasta que se colocaron tronos y el Anciano de los Días se sentó.
Su ropa era blanca como la lana.
Su trono eran llamas de fuego que fluía y salia por delante de el.
Miles y miles le atendían, diez mil veces diez mil se mantenían de pie, directamente ante El.

Daniel 7:9-10


Y mire y vi allí un elevado trono: parecía de cristal, y sus ruedas brillaban como el sol, y allí vi a los querubines.
Y de debajo del trono salían corrientes de fuego llameante, de modo que no podía mirarlas.
Y la Gran Gloria se sentaba allí, y Su atuendo brillante mas que el sol y era mas blanco que la nieve.
Ninguno de los ángeles podía entrar y contemplar su rostro por su magnificencia y gloria, y nadie de carne podía contemplarle.
El fuego llameante Le rodeaba, y un gran fuego estaba ante El, y nadie podía acercarse a El:diez mil veces se situaban de pie ante El.

1 Enoch 18b-23a




Y aconteció que mientras
Elias y Elíseo
iban andando
y hablando, un carro de fuego
y caballos de fuego
aparecieron de repente
y les separaron,
y Elias ascendió al cielo
en un remolino.
Eliseo,
viendo esto, imploro:
" Padre mio, padre mio, ¡los carros y los caballos de Israel!".
Y Eliseo no volvió a verlo.

2 Reyes 2:11 -12



El carro del trono de Dios (mercaba, en hebreo) fue descripto originalmente por Ezequiel, que escribió poco después de que los primeros exiliados judíos llegaran a Babilonia (587 a.C.).

" ...y el fuego parecía como cuatro criaturas vivas.
En apariencia, sus formas eran como la de un hombre, pero cada una de ellas tenia cuatro caras y cuatro alas.
Sus piernas eran rectas, sus pies eran como los de un becerro y brillaban como bronce bruñido.
Bajo sus alas, a los cuatro lados, tenían las manos de un hombre.
Las cuatro tenían caras y alas, y sus alas se tocaban unas con otras.
Cada una de ellas se desplazaba directamente hacia delante, no se daban la vuelta para moverse. Sus rostros tenían este aspecto: cada uno de los cuatro tenia cara de hombre, y en el lado derecho cada uno tenia cara de león, en el lado izquierdo tenían cara de buey, y también tenían la cara de un águila.
Así eran sus rostros. Sus alas estaban extendidas hacia arriba, cada una tenia dos alas que tocaban las alas de otra criatura a ambos lados, y otras dos alas que cubrían sus cuerpos(...).
La apariencia de estas criaturas vivas era como de brasas ardientes de fuego, o como antorchas.
Este fuego se movía adelante y atrás entre las criaturas, era resplandeciente y de el emanaba luz.
Las criaturas se desplazaban adelante y atrás como relámpagos de luz.

Ezequiel 1:5- 14


Fuentes Consultadas
Gaia Ediciones
Siguiente

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por tu Comentario